El pasado viernes, en el marco incomparable del Salón Liceo del Círculo de la Amistad, fue la noche de las hermandades y cofradías, celebrando por todo alto los 75 años de la Agrupación, creada en el año 1944. El Diario CÓRDOBA presentaba el libro 75 años de la Agrupación de Cofradías de Córdoba, todo un patrimonio periodístico rebosante de historia, de imágenes entrañables, de recorridos procesionales, de exaltaciones y pregones, de hitos brillantes y encrucijadas vibrantes que, paso a paso, fueron desarrollando y encumbrando la Agrupación de Cofradías. Manuel Pimentel, editor de Almuzara, en una magistral ponencia, dibujó con su palabra cincelada y brillante el lienzo de la Semana Santa de Córdoba, en el que hizo brillar proféticamente su horizonte: «La Semana Santa tiene futuro en este siglo acelerado y digital en el que cabalgamos sin norte, sobre el potro desbocado de internet». Nuestro director, Francisco Luis Córdoba, en la apertura del acto, señaló con precisión una de las claves de la Agrupación de Cofradías, en su singladura a lo largo de estos 75 años: «Haber sostenido el pulso de su responsabilidad en una creciente simbiosis con la ciudad y sus entrañas». Cerró el acto, el obispo de la Diócesis, Demetrio Fernández, tras las intervenciones del presidente de la Agrupación, Francisco Gómez; de la delegada de la Fundación de Cajasol, Mili Jiménez; y de las interpretaciones musicales de Alberto Paz. Sus palabras breves y clarividentes pusieron en el pentagrama de la noche cofradiera, esa nota que ilumina el verdadero sentido de las hermandades y cofradías: «Hacer presente a Dios en la sociedad, frente al laicismo que proyecta un mundo sin Dios». Fue, ciertamente, una noche emotiva y brillante. El libro de este 75 aniversario de la Agrupación será, sin duda, «un nazareno más» en las estaciones de penitencia de este año, con su cirio encendido en la historia, sus destellos literarios, sus bellísimos mensajes que aúnan el pasado, el presente y el futuro, las imágenes de antaño y los paisajes de esta hora, proclamando por nuestras calles la ardiente esperanza de un mundo resucitado como culmen del drama de la pasión y muerte de Jesús.

* Sacerdote y periodista