El Ayuntamiento de Montilla, con el apoyo económico de la Agencia Andaluza de la Energía, desarrollará a lo largo de los próximos meses tres proyectos dirigidos a mejorar la eficiencia energética y climatización de los colegios de Educación Infantil y Primaria (CEIP) San José, Beato Juan de Ávila y Gran Capitán. Para ello, la Junta invertirá cerca de 300.000 euros, mientras que el Consistorio aportará 130.000 euros.
Las dos actuaciones más importantes se desarrollarán en los colegios San José y Beato Juan de Ávila donde, además de la sustitución de la caldera -con un presupuesto de 40.000 y 48.000 euros, respectivamente-, se mejorará la carpintería metálica de las ventanas -con una inversión de 100.000 y 200.000 euros en cada caso-. Por su parte, el Consistorio actuará en la sustitución de la caldera del CEIP Gran Capitán (48.000 euros).
El alcalde de Montilla, Rafael Llamas, destacó durante una visita al CEIP San José -en la que estuvo acompañado de la teniente de alcalde del Área Sociocultural, Conchi Espejo; la teniente de alcalde de Obras Públicas, Raquel Casado; y de las representantes de las asociaciones de madres y padres de alumnos de los CEIP San José y Beato Juan de Ávila- que los proyectos para mejorar la eficiencia energética de los centros educativos de la ciudad cuentan con una «importante partida» dentro de los presupuestos para este año, con el objetivo de «mejorar el bienestar de los alumnos y profesores, además de reducir el consumo energético de los centros».
«Se trata de tres proyectos importantes que permitirán sustituir las calderas de tres centros y las carpinterías de algunos de ellos, y que se enmarca dentro de nuestro objetivo de una ciudad más sostenible y respetuosa con el medio ambiente», explicó Llamas que, asimismo, adelantó que en el caso del CEIP San José también se trabaja para la creación de un nuevo espacio cubierto, una medida apoyada por unanimidad por el Pleno municipal.
Por su parte, Conchi Espejo destacó que las nuevas medidas para mejorar la eficiencia energética de estos centros educativos no solo supondrá, en el futuro, un «ahorro importante» para las arcas municipales, al reducirse el consumo energético de estos edificios, sino que «se trata de una clara apuesta por la educación en la ciudad».
En este sentido, la teniente de alcalde del Área Sociocultural reconoció la necesidad de seguir invirtiendo en mejorar las instalaciones educativas de la ciudad. «Nuestros colegios tienen ya muchos años y, en base a nuestra apuesta por la educación, trabajamos dentro de nuestras posibilidades para adecentar estos espacios y garantizar el bienestar de nuestros niños», aseveró.
Un objetivo aplaudido por las representantes de las asociaciones de madres y padres de alumnos que agradecieron la apuesta del Consistorio por actuar en la mejora de la eficiencia energética de sus centros, dado que, a su juicio, «mejorar las condiciones en que se desarrollan las clases, repercute positivamente en el rendimiento de los alumnos».
