La Junta de Gobierno del Ilustre Colegio de Abogados de Lucena ha adoptado diversos acuerdos dirigidos a disminuir los negativos efectos económicos y asistenciales que el covid-19 está ocasionando en la sociedad y, especialmente, en los colegiados adscritos a su Corporación, así como en las residencias de ancianos y otros centros sociales con internos ubicados en su territorio que, nadie puede negar, están sufriendo con gran virulencia esta pandemia, siendo consciente el Colegio de su particular crisis.

Por ello, se ha acordado contribuir económicamente con 5.000 euros para cada una de las siguientes entidades: Asociación Nueva Aurora Residencia de Ancianos, de Lucena, Fundación Pública Andaluza San Juan de Dios, de Lucena, Residencia Juan Crisóstomo Mangas, de Rute , Residencia Municipal Santa Teresa de Jesús, de Benamejí, Asociación Comarcal Pro Personas con Discapacidad Psíquica Virgen de Araceli (Amara), de Lucena, Residencia Municipal de la 3ª Edad, de Iznájar.

Igualmente, en cuanto a los colegiados, se ha acordado un elenco de medidas que van desde la suspensión en el pago de cuotas para todos los colegiados hasta la creación de un fondo económico al que podrán acceder, con sometimiento a determinadas bases, los profesionales que ejercen la abogacía y que han visto paralizada su actividad.