Estimado Sr. Director, hoy, día 2 de mayo, hemos salido por primera vez mi mujer y yo a dar un paseo. Como ambos tenemos más de 70 años, hemos esperado al horario estipulado por el gobierno y hemos salido a las once menos cuarto. Desde el primer momento hemos advertido que la densidad de personas y coches en la calle no se correspondía con la que debía de haber en un horario en el que solamente pueden salir mayores de 70 años y compradores. Adolescentes sin respetar la distancia física, muchas personas con carritos de compra, coches con dos y tres personas, padres con uno o dos niño … ¿Sorprendente? En el fondo, no. Es humano y es comprensible. Sin embargo, algo me ha llamado la atención, la multitud de personas jóvenes y mayores que estaban con sus perros. Comprendo que los animales domésticos tienen derechos, pero no comprendo que tengan más derechos que las personas mayores y los niños. Si hay horarios para ellos, en algunos casos, bastante crueles en tiempo de calor, como que los niños tengan que salir entre 12 de la mañana y 7 de la tarde, también debería haberlo para los perros. Si los dueños son menores de 70 años, de 8 a 10, si son mayores, de 10 a 12 o de 7 a 8. No entiendo en absoluto que un perro tenga prioridad sobre una persona (sea adulto o niño). Creo que debería modificarse urgentemente esta discriminación.
