El Valencia perdió la oportunidad de colocarse a dos puntos del líder, el Barcelona, con una derrota sonrojante ante el Getafe, que ganó 1-0 gracias a un golazo de Markel Bergara después de jugar con un futbolista menos desde el minuto 25 por la expulsión de Mauro Arambarri. El encuentro estuvo condicionado por la salida del centrocampista uruguayo, que en el último tramo de la primera parte vio su segunda cartulina amarilla por una entrada sobre Martín Montoya que protestó mucho la afición del Getafe. Sin embargo, aunque tocó la pelota, el jugador charrúa arrastró al lateral derecho del Valencia y la decisión del árbitro pareció correcta. Más dudosa fue la de su linier, que justo antes anuló un gol a Amath por fuera de juego. La hinchada del cuadro madrileño tomó la matrícula a David Medié Jiménez y el choque cambió. No lo hizo a favor del Valencia, que habría sido lo lógico. Cambió para el Getafe, que estaba siendo mejor y estaba cociendo a fuego lento su victoria. Esa expulsión, frenó momentáneamente el impulso del cuadro azulón y mantuvo a su rival en la mediocridad.

Y es que el cuadro de Marcelino García Toral no hizo nada. Ni antes de la expulsión, ni después. Fue un equipo gris, sin ideas, apático y timorato. Sólo Dani Parejo, con tres lanzamientos de falta que salvó Vicente Guaita, generó algún peligro. El resto, parecía ajeno a la opción de recortarle dos puntos al Barcelona para consolidarse como aspirante al título. El Getafe, con un jugador menos, incluso llegó a dominar el choque hasta el descanso. Con menos amplitud que antes de la salida de Arambarri, pero consiguió seguir en la pomada con un futbolista menos. Incluso dispuso de una clara oportunidad, con un cabezazo de Jorge Molina a pase de Damián Suárez que salió por encima del larguero cuando el delantero azulón estaba solo delante de la portería de Neto. El paso por los vestuarios acrecentó los defectos del Valencia, irreconocible en el Coliseum Alfonso Pérez. Se esperaba un toque de corneta para acabar con el dominio del Getafe y salir a por los tres puntos, pero no fue así. El equipo de Bordalás siguió enchufado y con la intención de conseguir la machada de acabar con el equipo de moda de la Liga. Y lo logró gracias a Markel Bergara que se sacó de la nada un disparo desde fuera del área que entró en la portería de Neto. El Valencia, pese a la superioridad, no logró empatar.