Promoviendo vocaciones STEM desde la Biomedicina es el nombre del programa que junto al Imibic vienen desarrollando en el CEIP Europa y que, más allá de promover las vocaciones científicas y dar visibilidad a la actividad que desarrolla este centro de investigación, trata de crear cultura científica entre el alumnado. Tal y como explica la docente Beatriz Toledo, «a raíz de una visita que nos hizo Francisco Manuel Conde, a petición mía, aprovechando que es el padre de uno de los alumnos, nos dimos cuenta de lo importante que era para los niños aprender desde la práctica». Esta profesora, ayudada por la directora del centro, Fátima Díaz, contactó con el Imibic que, finalmente, aceptó la propuesta, que a su vez cuenta con ayuda de la Federación Española para la Ciencia y la Tecnología. Con todo esto, explica la docente que lo que buscan y consiguen es que «los chicos sigan siendo curiosos, pregunten, intenten dar soluciones a los problemas y que vean en la ciencia un instrumento que permita desarrollar en ellos un espíritu crítico, tan necesario en estos tiempos».

el programa/ Francisco Conde, el biólogo, acude a clase cada tres jueves. En sus visitas trae consigo el material que van a usar: microscopio, ordenador, lupa de aumento, tubos de ensayo, bastoncillos, placas Petri y un sinfín de ideas para trabajar con los niños. Así, estos pequeños científicos han descubierto cuál es la esencia del líquen, observando las algas y hongos que lo componen. Han trabajado con moscas de la fruta, descubriendo su ciclo de vida, desde el nacimiento de las larvas hasta que crecen, aprendiendo a distinguir los machos de las hembras. Han hablado de bacterias descubriendo muestras de colonias bacterianas provenientes de ellos mismos.

Todas estas actividades, explica Toledo, fomentan el interés para poder trabajar el pensamiento científico en el aula desde Educación Primaria y sobre todo la toma de conciencia de que sin ciencia, no hay futuro.H