La empresa pública AENA ya ha dado a conocer su plan de márketing para el aeropuerto de Córdoba. Se abren, por fin, posibilidades de generar actividad en esta infraestructura de comunicaciones que, tras una importante inversión pública del Estado, está muy cerca de figurar en el catálogo de dotaciones infrautilizadas que salpica España de norte a sur. La compañía AENA propone un programa a dos años vista que solo tendrá visos de éxito si se implican tanto las instituciones --Junta de Andalucía, Ayuntamiento y Diputación-- como los sectores empresariales y operadores turísticos. El proyecto tiene un doble enfoque. Por una parte, convencer a compañías para la implementación de vuelos comerciales y chárter con los destinos que parecen tener más posibilidades, tanto en el interés de los cordobeses como de turistas que nos visiten, y añadir a ello vuelos ligados a sectores específicos de alto poder adquisitivo, como el mundo del caballo y la caza. Por otra, ofrecer las instalaciones para actividades que no tienen espacio en otros aeródromos, como escuelas de vuelo, trabajos aéreos y mantenimiento. Combinadas ambas estrategias, podrían producir un efecto positivo. Sin lanzar campanas al vuelo, pues las escasas experiencias precedentes han sido fallidas, pero por un sentido de la responsabilidad es necesario poner toda la carne en el asador para aprovechar la inversión que se hizo y hacerla rentable para Córdoba.