El arqueo de la tesorería municipal arroja, al cierre de enero, una cifra récord de más de 119 millones de euros en el Ayuntamiento. La oposición del Partido Popular se ha lanzado a la yugular del equipo de gobierno que preside Isabel Ambrosio. y es que tan malo es encontrarse un Ayuntamiento con las arcas vacías, como le ocurrió al PP en su anterior mandato, que tener acumulado un dinero que no se gasta. Los populares basan sus críticas en que no se están destinando fondos a proyectos que podría revitalizar los barrios deprimidos de la ciudad y tampoco se están pagando los atrasos, por ejemplo a las plantillas de la Policía Local y los Bomberos, ni se bajan los impuestos y tasas municipales. Y el pago a proveedores, lejos de los 30 días legales, se sitúa en 67 jornadas. La alcaldesa contraataca, afirma que buena parte de esos 119 millones corresponden a provisiones de fondos que habrá que desembolsar en el futuro (por ejemplo, aportaciones a la reforma del Palacio de Congresos o al Plan Turístico de Grandes Ciudades) y, en lo que se refiere al pago de sueldos, atribuye la tardanza a los reparos de la Intervención, que han obligado a reiniciar los expedientes. Añade que el PP llegó a tener un remanente de 42 millones y su media de inversión anual era solo de 2 millones, frente a los 20 actuales. Dos posiciones encontradas en las que se echa en falta una explicación más detallada y completa por parte del equipo de gobierno municipal, dado que los 119 millones en cuestión vienen a añadir argumentos a los que ponen en duda la eficiencia en la gestión del Ayuntamiento.