La instalación de los nuevos contadores de luz por parte de Endesa -y que el pasado mes marzo provocó un apagón generalizado del alumbrado público en muchas calles de Montilla- ha generado un nuevo contratiempo en los servicios públicos de la ciudad.

La diferencia entre la potencia contratada y la demanda del sistema de riego del Paseo de Cervantes, una de las principales zonas verdes del casco urbano, ha provocado en los últimos días la «caída» del servicio, dificultando su correcto funcionamiento.

El problema, en el que han estado trabajando los servicios técnicos municipales en los últimos días, tiene su origen en la puesta en marcha de los nuevos contadores instalados a finales de diciembre por Endesa que, al detectar una mayor demanda de potencia eléctrica de la que ha sido contratada, limita el suministro que hace funcionar el servicio automatizado de riegos instalado en este parque de Montilla.

«Los nuevos contadores inteligentes se detienen una vez que se supera la potencia máxima contratada», explicó a CÓRDOBA la teniente de alcalde de Infraestructuras, Urbanismo y Medio Ambiente, Raquel Casado, quien precisó que el sistema de riegos necesita poner en marcha una bomba para extraer el agua de un pozo, lo que «provoca que no se consiga la presión suficiente para que el riego sea efectivo».

De este modo, según señaló la edil, una vez que Endesa conceda la ampliación de la potencia eléctrica contratada para este sistema, el servicio funcionará «sin problema» pues «los periquitos están bien dirigidos».

El pasado mes de marzo, tan solo tres meses después del cambio de los contadores eléctricos que abastecen los diferentes servicios que ofrece el Ayuntamiento, se registró un apagón en numerosas calles de la ciudad, tras suspenderse el suministro a cinco cuadros eléctricos, a pesar de que el Consistorio había solicitado previamente el reconocimiento de estos contadores como «suministro esencial».

En este sentido, según apuntó Raquel Casado, desde principios de año, el Área de Servicios del Ayuntamiento de Montilla trabaja en la adopción de medidas a medio y largo plazo para dar respuesta a estas incidencias. Entre ellas destaca el cambio de los boletines del suministro en los servicios con menos potencia contratada de la requerida, así como la sustitución de las antiguas luminarias de vapor de mercurio por lámparas con tecnología led, una iniciativa que se viene implantando «con bastante éxito» por todo el casco urbano.