Un equipo de submarinistas de la Guardia Civil busca desde ayer en el embalse de Iznájar al piloto de un autogiro biplaza que se precipitó al agua tras colisionar con una línea de alta tensión. El aparato, pilotado únicamente por una personas, un varón de unos 50 años, había salido de un aeródromo de Antequera y sobre las once y cuarto de la mañana sobrevolaba el pantano. Testigos presenciales del suceso explicaron que, en un momento dado, el piloto efectuó una maniobra, pasó por uno de los ojos del puente de Agromán y al remontar el vuelo chocó con una línea de alta tensión, lo que provocó una explosión en el aparato, que se hundió en el agua a gran velocidad.

Inmediatamente se desplazó a la zona un dispositivo de rescate con efectivos de la Guardia Civil, Policía Local, bomberos de los parques de Lucena y Puente Genil, protección civil y equipos sanitarios. «Nos han comunicado que un pequeño helicóptero, tripulado por una persona, ha chocado contra los cables de un tendido eléctrico que cruza el pantano, ha caído al agua y se ha sumergido rápidamente», relataba el alcalde, Lope Ruiz, en el lugar del accidente. La zona se encuentra a menos de un kilómetro de la población -algunos diseminados se quedaron sin suministro eléctrico como consecuencia del accidente- y los equipos de rescate tienen como referencia el mismo cableado eléctrico, cortado y tensado hasta sumergirse en el agua, ya que se piensa que el aparato puede estar enredado ahí, una zona en la que la profundidad del pantano puede superar los 50 metros.

En torno a la una de la tarde se unía al dispositivo un helicóptero militar que trasladó a un buzo y comenzó con las prospecciones en el punto del siniestro. Posteriormente se sumó al dispositivo de salvamento el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil. Algunos barrios de Iznájar y de diseminados de la zona se han quedado sin suministro eléctrico por el corte de los cables. Ya por la tarde, y en declaraciones a los periodistas, el capitán de la Guardia Civil Antonio Quijano precisó que el aparato siniestrado es un autogiro biplaza que realizaba un vuelo particular y que la principal hipótesis indica que el piloto no vio los cables de alta tensión» al salir del puente, informa Efe. Quijano explicó que el autogiro «no tiene muchas limitaciones» para volar y podía hacerlo en la zona del pantano de Iznájar.

Por su parte, el director general de Emergencias y Protección Civil de la Junta de Andalucía, Agustín Muñoz, que también se desplazó al lugar del siniestro para seguir de cerca los trabajos de rescate, resaltó que se está «haciendo todo lo posible para localizar al piloto cuanto antes».

Por otra parte, la Junta de Andalucía ha activado al Grupo de Intervención Psicológica en Emergencias y Desastres (Giped) para la atención a la familia del piloto mientras el dispositivo de rescate se afana por recuperarlo, informa Europa Press. Igualmente, desde el Servicio de Emergencias 112 Andalucía se afirmó que «todos los esfuerzos se centran en recuperar al ocupante de la aeronave siniestrada lo antes posible».

Agentes en una zodiac, en la zona balizada donde cayó el aparato. FOTO: EFE

EL ÚLTIMO ACCIDENTE MORTAL / La tragedia de ayer trajo inevitablemente a la mente de los iznajeños otro accidente mortal, el ocurrido el 1 de enero del 2013 a primera hora de la mañana, cuando un joven de 19 años perdió la vida al caer al agua el vehículo en el que viajaba con su novia y su madre, que era la conductora y había ido a recoger a la pareja tras la fiesta de Nochevieja. Ambas mujeres pudieron escapar del coche antes de que este se sumergiera en el agua tras una prolongada caída, mientras el muchacho quedó atrapado en el interior.

Su cadáver no pudo ser rescatado hasta dos días más tarde del accidente, después de un complejo dispositivo de los miembros del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil dentro del agua debido a la gran profundidad y la nula visibilidad.