La familia de Ángeles Zurera ha propuesto a la Policía Científica de la Guardia Civil nuevas zonas de búsqueda, dentro del término municipal de Aguilar, para retomar los trabajos de localización de la mujer que desapareció el día 2 de marzo del año 2008.

Según ha explicado a este periódico el hermano de Ángeles, Antonio Zurera, la familia ha propuesto estos nuevos itinerarios de búsqueda con la intención de que los coordine la Policía Judicial de la Guardia Civil, pero indica que, en caso de que no se aceptara la propuesta, la familia cuenta con voluntarios dispuestos a llevar a cabo esta nueva batida.

Además, Zurera recuerda que recientemente se ha podido desentrañar el contenido de dos teléfonos móviles de su hermana. En uno de ellos, indica, solo había algunas imágenes de valor sentimental para la familia, pero en otro había una larga relación de llamadas y mensajes de texto que, por ahora, han aportado poca información. Aun así, junto con este material, la familia ha entregado a la Guardia Civil un informe criminológico, que ha sido elaborado por una empresa privada a petición de la familia y en el que se aportan algunas propuestas de investigación. Antonio Zurera explica que se ha solicitado una reunión con los responsables de la Policía Judicial de la Guardia Civil para aportarle todas estas nuevas sugerencias y propuestas de trabajo que espera que sean tenidas en cuenta.

Todo este trabajo, indican desde la familia, se está llevando a cabo con la intención de que el caso no caiga en el olvido y se mantenga activa la investigación sobre la desaparición de esta vecina de Aguilar de la Frontera. En este objetivo está implicado todo el municipio aguilarense, como demuestra el acto celebrado el pasado día 25 de febrero, cuando la Plataforma de Ángeles Zurera volvió a convocar una concentración a la que se sumaron vecinos, colectivos y empresarios que volvieron a pedir que se siga buscando a su vecina y reclamaron que se haga justicia con este caso que tiene consternado al pueblo desde hace 11 años, cuando Ángeles Zurera salió una noche de casa sin dinero, sin documentación, sin gafas y sin teléfono, sin que se sepa el rumbo que tomó.