El Ayuntamiento de Montilla ha concluido ya la instalación del nuevo entoldado que cubrirá la zona de esparcimiento de la Plazuela de la Inmaculada, en pleno centro de la localidad, durante los meses de primavera y verano. La iniciativa, cuya ejecución se había previsto para el pasado ejercicio y que, por diversos motivos, terminó posponiéndose, ha contado con una inversión cercana a los 6.500 euros y se enmarca dentro del proyecto Montilla, Patrimonio Conectado.
Hace justo un año, el Consistorio aprobó una modificación de crédito para la puesta en marcha de esta actuación que pretendía dar respuesta a las demandas de los comerciantes de la zona centro de dotar este enclave de la ciudad de más espacios de sombra. Sin embargo, los plazos administrativos ligados a la modificación presupuestaria y la tardía adjudicación del proyecto obligaron, finalmente, a posponer su instalación hasta esta primavera.
En este periodo, según explicó a CÓRDOBA el concejal de Promoción Económica, Innovación y Turismo, Manuel Carmona, el Consistorio ha trabajado en el desarrollo del proyecto Montilla, Patrimonio Conectado, una iniciativa que pretende «impulsar y dinamizar el entorno de la Corredera» y que, entre sus actuaciones, recogía el entoldado de la Plazuela de la Inmaculada a través de tres módulos que cuentan con su propia cimentación.
El proyecto Montilla, Patrimonio Conectado «cuenta con un presupuesto total de 12.000 euros para desarrollar una quincena de actividades dirigidas a visibilizar y activar el patrimonio en torno a la calle Corredera y el centro histórico, así como impulsar el turismo a través de diversas actividades culturales, entre otras muchas propuestas», explicó Carmona, a la vez que adelantó que el proyecto cuenta con la aprobación provisional del programa de ayudas del Grupo de Desarrollo Rural (GDR) Campiña Sur y que será cofinanciado con recursos procedentes de la UE en el marco del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader).
La instalación del nuevo toldo en la zona de esparcimiento de la Plazuela de la Inmaculada se suma a otras iniciativas desarrolladas en este mismo enclave por el Ayuntamiento de Montilla como el soterramiento del cableado eléctrico, una actuación que venía siendo demandada por los vecinos de la zona centro desde hacía más de veinte años y que fue posible atender gracias al proyecto de remodelación del último tramo de la calle Corredera, en cuyas obras se acometieron las infraestructuras precisas.
