Urbanismo tiene planes para el entorno de La Calahorra que difieren en algunos aspectos de los previstos en el actual PGOU y de los anunciados por el PP en su mandato, que no prosperaron. Esos planes consisten en ubicar en otro espacio el futuro Museo de Bellas Artes y en construir en su lugar un auditorio y sala de exposiciones. El solar que el organismo municipal ve más adecuado para el Bellas Artes es el ubicado justo al lado del Centro de Creación Contemporánea de Andalucía (C3A), con lo que ocupará una pequeña parte de la huella del antiguo Palacio del Sur (el proyecto que diseñó el arquitecto holandés Rem Koolhaas, que después modificó para abaratarlo y que fue descartado definitivamente por el PP por su alto coste). Ese espacio es usado ahora como aparcamiento. El resto del ámbito de la península de Miraflores que hay hasta La Calahorra se quedará como zona verde abierta a actividades, es decir, que allí no tendrá cabida ningún equipamiento más, por lo que en la ordenación desaparecerá el resto de la huella dibujada para el Palacio del Sur.

Estos cambios y algunos más fueron anunciados ayer por el presidente de Urbanismo, Pedro García (IU), y el gerente, Emilio García, y quedarán plasmados en una innovación de PGOU que pretenden iniciar y que expondrán al consejo rector y al Consejo del Movimiento Ciudadano, con el que prevén reunirse la semana próxima.

La reordenación propuesta para Miraflores contempla dejar el colegio Rey Heredia en pie y convertir el espacio que le rodea en una gran plaza, que, además, gana en zona verde. Esa gran plaza ya está prevista en el PGOU e implica la expropiación y el derribo de dos bares, el Miguelito y Los Romerillos, y de una veintena de viviendas repartidas entre Acera Pintada y la plaza del Rastro. Esas expropiaciones están previstas desde hace años, e incluso la compensaciones en la manzana residencial que hay junto al hotel Hesperia, pero el PP las descartó en su plan por su coste y por no haber concluido. Otra de las novedades es el destino que se le da a un solar situado justo en frente del C3A, que Urbanismo prevé dedicar a un albergue juvenil especializado en arte y creación.

El presidente de Urbanismo aseguró que la alcaldesa, Isabel Ambrosio (PSOE), conoce la propuesta, por lo que cuenta con el beneplácito del equipo de gobierno. La propia alcaldesa, a mitad de diciembre, en su plan para reducir la brecha histórica de Córdoba, propuso la construcción de un centro cultural en Miraflores que sirva de auditorio y de sede de la Orquesta de Córdoba (que iba a tener un espacio en el centro de congresos de Koolhaas).

Aunque la idea de Urbanismo es llevar a cabo una innovación, que, según sus previsiones, podría necesitar entre seis y siete meses de trámites, tanto su presidente como su gerente dejaron claro que el Gobierno central (que debe construir el Bellas Artes) y la Junta (que tendría que financiar el albergue) pueden llevar a cabo las inversiones previstas sin necesidad de esperar. Ambos subrayaron también que la reordenación, «más sensata y acorde con las necesidades de la ciudad», «mira hacia el sur», da respuesta a peticiones vecinales y proporciona una calificación al C3A, que está construido sobre una zona verde. Como flecos, queda resolver el tema de los aparcamientos.