«Sería bueno para Córdoba ofrecer actividades de ocio en el río»

-¿Su espíritu emprendedor le viene de herencia familiar?

-Mi abuelo materno, Pepe, era joyero, empresario de los que trabajan de sol a sol para tener a su familia bien atendida. Montó su empresa de la nada, un emprendedor de los de entonces. Eran otros tiempos. Antes se captaban los clientes a través de contactos y referencias y ahora a través de Google y Facebook. Por otro lado, mi padre siempre ha trabajado en banca, por lo que he vivido muy de cerca el mundo financiero y de las empresas en casa.

-¿Boatjump ha sido su primera experiencia profesional?

-No. Comencé haciendo prácticas en Londres, en banca y auditoría durante dos veranos. Continué 4 años en la auditora Ernst & Young en Madrid. En el 2012 me surgió una oportunidad como Controller Financiero en TUI Travel, el mayor operador turístico de viajes del mundo, con sede en Palma de Mallorca. Allí me introduje por completo en el sector turístico y comenzó mi afición por la náutica. TUI Travel no alquila barcos, pero sí tiene una operativa de base muy similar a la de Boatjump, ya que opera como un gran banco de camas para proveerlas a sus clientes y nosotros actúamos como un gran banco de barcos para proveerlos a nuestros clientes.

-¿Cuántos socios tiene Boatjump?

-Estamos los 3 socios fundadores (el compostelano Pablo Ruibal, el salmantino Jaime Vara y yo) y ahora tenemos un cuarto socio, el también cordobés Rafael Bernal, nuestro ingeniero puntero en tecnología. En total, estamos 4 cordobeses en la firma y aproximadamente la mitad de la plantilla está integrada por mujeres.

-La sede de vuestra empresa estaba en los inicios en Palma de Mallorca y de allí la trasladastéis a Valencia.

-El plan de negocio surgió en Palma de Mallorca en el 2015, ya que residíamos y trabajamos allí. Yo trataba de alquilar un barco para pasar una semana con unos amigos en Menorca y me resultaba tremendamente complicado. Así que comenzamos a comentar Pablo, Jaime y yo lo difícil que era mientras preparábamos una barbacoa con amigos. Estuvimos 6 meses desarrollando el plan de negocio de www.boatjump.com y preparando el PMV (producto mínimo viable) para comenzar a vender nuestro negocio en una pequeña habitación de trastos que tenía Pablo. Trabajábamos en nuestro proyecto todas las noches al salir de nuestros trabajos y los fines de semana. El momento de la verdad llegó en febrero del 2016 cuando los tres socios fundadores dimos el paso de dejar nuestros trabajos estables en distintas empresas de Mallorca para poner en marcha Boatjump. Establecimos la oficina en el salón de mi casa. Quitamos todos los muebles y compramos unas tablas grandes de IKEA a modo de escritorio. Comenzamos en marzo del 2016, habiendo dejado nuestros trabajos sin alquilar ni un barco, pero con el objetivo claro de lo que queríamos hacer y cerramos el año 2016 facturando medio millón de euros. El verano pasado nos seleccionaron las principales aceleradoras de empresas en España y tuvimos la suerte de poder elegir a la número una. Esta Lanzadera es una iniciativa de aceleración de empresas financiada por Juan Roig (presidente de Mercadona) que apoya en sus inicios a start-ups (empresas emergentes) como la nuestra, para que puedan tener un crecimiento importante y sostenible en el tiempo. Este programa, auspiciado por Juan Roig, incluye asesoramiento, formación y tutoría de los emprendedores durante 9 meses, así como una aportación de hasta 200.000 euros de financiación. De ahí nuestro traslado a Valencia.

-¿Cuáles son los servicios que presta esta firma y qué tipos de barcos se pueden alquilar?

-A mí me gusta definir Boatjump como el booking.com para el alquiler de barcos. Tenemos una flota de 5.000 barcos disponibles para el alquiler en destinos. En España, desde Cadaqués hasta Tarifa, pasando por Baleares, nuestro destino estrella. También en las Islas Virgenes Britanicas (en el Caribe), Croacia, Grecia e Italia.

-¿Existe mucha competencia en el sector?

-Sí, como en todos los sectores. Nosotros apostamos por la calidad en el servicio al cliente. Tenemos a un equipo de expertos que te atiende personalmente por teléfono y te proporcionan las mejores recomendaciones sobre cada destino. Se puede decir que llevamos al cliente de la mano, conscientes de la responsabilidad que supone gestionar sus vacaciones en barco.

-¿Qué perspectivas de facturación tiene su empresa?

-El objetivo para el 2017 es facturar 1,2 millones de euros. Lo vemos realista y alcanzable. Ya contamos con 17 profesionales que lo harán posible. Uno de nuestros principales hitos ha sido el de alquilar barcos en el Caribe. Ahora mismo hay clientes de Estados Unidos que salen a navegar por el Caribe reservando su barco con una empresa española, nuestra Boatjump, increíble pero cierto, y ya supone más del 25% de nuestro volumen de facturación. Es lo positivo de la globalización, que permite a una empresa internacionalizarse y prestar sus servicios en otros países.

-¿Le parece una pena que en Córdoba no se puede alquilar un barco para recorrer el Guadalquivir como sí es posible en Sevilla?

-La verdad es que el río Guadalquivir en Sevilla ofrece una oferta de ocio muy atractiva tanto para residentes como para turistas. Sería bueno, muy positivo para Córdoba poder ofrecer actividades de ocio en el río. Sería un buen reclamo, pero siempre valorando que técnica y presupuestariamente fuera posible.

-¿Cuál es el cliente tipo que se acerca a su empresa y para qué destinos se demanda más este tipo de transporte?

-Lo más habitual es que nuestros clientes sean familias, parejas o grupos de amigos de 30 a 60 años que quieren alquilar un velero o catamarán una semana completa en Baleares. A medida que se acerca el verano nos demandan también muchas salidas de un día o de fin de semana en barcos a motor.

-¿Cuántos clientes ha registrado Boatjump desde que se fundó la empresa en marzo del 2016 hasta ahora?

-Pues casi 2.000 clientes de más de 16 países han reservado ya con Boatjump.

-¿En qué países está la plataforma presente?

-Como acabo de citar hemos tenido ya clientes de más de 16 países (España, Estados Unidos, Canada, México, Alemania, Argentina, Francia, Holanda o Suiza) y tenemos concentrada nuestra oferta sobre todo en cinco destinos: España, Islas Vírgenes Británicas, Croacia, Grecia e Italia.

-¿Sabe capitanear un barco pequeño o mediano?

-Por mi título de patrón, que obtuve en el 2014, puedo llevar barcos de esta 15 metros (50 pies) y salgo a navegar siempre que tengo oportunidad. Aunque desde que comenzó la aventura de Boatjump nuestro tiempo libre es muy escaso y pasamos casi todo el día en la oficina. Además, desde que comenzamos a operar en el Caribe, la oficina está abierta casi las 24 horas, con turno de noche. Vemos pasar cientos de clientes todos los días que reservan su barco, pero a nosotros no nos queda tiempo para navegar. A pesar de ello, el ambiente de trabajo es excepcional, nos apasiona lo que hacemos y eso se nota y se transmite al equipo y a los clientes.

-¿Cómo es que tiene tanta afición por el mar?

-Siempre he veraneado en Torrox Costa, pero mi afición no viene de allí. Un tío mío es patrón y he navegado con él en Málaga, en el pantano de la Breña e incluso hicimos una travesía en catamarán de Valencia a Ibiza hace años. Así que cuando me mudé de Madrid a Mallorca no lo dudé y me saque el título de patrón. En estos 3 años como patrón he navegado por Málaga, Mallorca, Ibiza, Cabrera, Menorca, Altea y realizado travesías entre islas. No hay mejor plan de vacaciones que una semana con amigos o familia en un barco, ya que te permite disfrutar de la tranquilidad de la naturaleza, llegar a lugares inaccesibles a pie y vivir la aventura de ir donde te lleve el viento.

-¿Por casualidad no será de los que se marea en los barcos?

-Tengo suerte de no marearme. Suelo ser el patrón cuando salgo a navegar con amigos. Sería muy mala señal ver al patrón mareado. Alguna vez me ha pillado mala mar, sobre todo en la costa norte de Menorca, pero con la tensión y la adrenalina del momento no te da tiempo a marearte.

-¿Qué patrimonio ha podido conocer a bordo de un barco?

-Más que enclaves concretos, para mí lo mejor es cuando llegas con el velero al atardecer, te quedas fondeado en una cala y a la mañana siguiente te despiertas temprano para ver amanecer y darte el primer baño del día. Eso no tiene precio. Y hay dos lugares que me sorprendieron gratamente al hacer esto, Cabrera y Cales Coves (Menorca). En Boatjump siempre decimos que alquilar un barco está alcance de todos. Hay que quitar el cliché de que la náutica es para ricos. Un velero para 10 personas durante una semana en agosto en Baleares puede rondar los 3.000 euros, que son 300 euros por persona. Sale más barato que ir a un hotel o un apartamento y se trata de unas vacaciones inolvidables, diferentes y que enganchan.

-¿Cómo es su día a día en esta empresa?

-Comienzo temprano. A las 7 salgo a hacer deporte y luego un buen desayuno para empezar con energía. A las 8.30 estoy en la oficina y planifico lo que voy a hacer. Tenemos la empresa dividida en cuatro grandes bloques (ventas, markéting, tecnología y finanzas). Mi responsabilidad es llevar las finanzas de empresa, su administración y operaciones. No existe la rutina en una start-up, ya que cada día es diferente y estamos siempre dándole vueltas a la cabeza sobre cómo podemos hacerlo mejor, crecer más rápido y dar mejor servicio al cliente. Mi día se reparte entre tareas relacionadas con mi área de finanzas y labores más estratégicas con los otros tres departamentos para entender bien cómo estamos evolucionando y hacia dónde queremos ir.

-Como empresario de éxito, ¿qué negocio cree que podría funcionar en Córdoba actualmente?

-Humildemente creo que estamos empezando. El éxito es algo que se consigue con mucho trabajo y cabeza. Quizás en unos años llegue el éxito cuando consigamos democratizar la náutica y hacerla accesible a cualquier ciudadano. Yo apostaría por la tecnología. Es la clave para crear negocios de futuro y competitivos. Tecnología relacionada con el sector agrario o las energías renovables. En los últimos años se están instalando empresas en el parque tecnológico Rabanales 21. Por otro lado, también hay empresas orientadas a alojamientos turísticos de carácter sostenible, tipo Córdoba Bed and Be, que ofrecen un producto diferente, muy atractivo para el turista.