La Policía Nacional tuvo que intervenir en la tarde del miércoles en los alrededores de la Mezquita para aclarar una situación que había causado cierto revuelo. Según fuentes de la Policía Nacional, algunos transeúntes alertaron de la existencia de un equipaje abandonado junto a la Mezquita. Los agentes se personaron en el lugar y localizaron al propietario de la maleta, que explicó que su intención era entrar al templo a orar, pero que como no le permitían entrar con las maletas las había dejado fuera. Los agentes explicaron al turista el revuelo originado, y este, según las mismas fuentes, comprendió perfectamente la situación, recuperó su equipaje y continuó con su visita turística.