Neurólogos del hospital Reina Sofía hacen un llamamiento a la población, con motivo del Día Nacional del Ictus que se celebró ayer, para recalcar la importancia de identificar con rapidez los primeros síntomas de la enfermedad a fin de que avisen a los dispositivos sanitarios urgentes a la mayor brevedad para que se puedan poner en marcha los protocolos de actuación.

El responsable de la Unidad de Gestión Clínica de Neurología del complejo, Juan José Ochoa, aconseja "llamar al 061 de inmediato o acudir al servicio de urgencias si identifica en un familiar o persona cercana alguna de la principales señales de alerta de un infarto cerebral: pérdida de fuerza en la cara, brazo y/o piernas de un lado del cuerpo, trastorno de la sensibilidad, alteración repentina del habla, dolor de cabeza de inicio súbito y sensación de vértigo intenso".

El doctor Ochoa señala que "cuando alguien se percata de que una persona de su entorno sufre alguno de estos síntomas -la presencia de uno de ellos es suficiente motivo para acudir al hospital- debe avisar sin demora para que el paciente pueda recibir atención sanitaria lo antes posible, ya que las primeras horas desde el inicio de los síntomas son claves y cuanto antes se actúe más posibilidades de recuperarse tendrá la persona que acaba de sufrir este episodio".

Este especialista apunta que "aunque este trastorno es más común a edades más avanzadas, cada vez se registran más casos entre adultos jóvenes a causa, entre otros motivos, a los hábitos de vida insanos que adoptan, tales como exceso de alcohol o de drogas, hipertensión arterial, tener niveles de colesterol elevados en sangre, la diabetes, la obesidad, llevar una vida sedentaria, dietas ricas en sal y grasas y enfermedades del corazón, como la fibrilación auricular". En el Reina Sofía se atienden anualmente alrededor de 900 accidentes cerebrovasculares.