Córdoba tiene dieciséis cámaras sancionadoras activas, entre las ocho que están controlando el acceso de tráfico en zonas de circulación restringida (Acire), las cuatro de los carriles para bus y taxi, y las cuatro de los semáforos (los denominados foto-rojo). De todas ellas, dos son las que captan más infracciones. Según se desprenden de los datos que maneja la delegación de Movilidad del Ayuntamiento, la mitad de los multados por cámaras entre enero y agosto de este año han sido conductores que se han colado por las colocadas para restringir el acceso a Alfaros (Puerta del Rincón) y a San Pablo. En total, en ese periodo analizado ha habido 43.416 sancionados, de los que 21.930 fueron captados por los dos dispositivos citados. La cámara de la Puerta del Rincón tiene por sí sola una actividad considerable como muestran sus 12.944 multas de tráfico, el 30% del total, lo que indica que, a pesar de que cuando empezó a funcionar en el 2017 disminuyó a la mitad el tráfico de Alfaros y, consecuentemente, del centro, esta vía sigue teniendo más tránsito del que debería. Tras ella, con 8.986 sancionados, están la cámara de San Pablo; la de Valladares, con 5.464; la del carril bus/taxi de Ronda de los Tejares -activa desde final del 2017-, con 3.593; y la de Caño Quebrado (Ribera), con 3.564. Llama la atención cómo este último dispositivo, cuyo objetivo es impedir el paso delante de la Puerta del Puente, ya no tiene el impacto que tuvo al principio.

El número de multas de tráfico se ha incrementado un 2,1% entre enero y agosto en relación con el mismo periodo del 2018, cuando se contabilizaron 42.486, por lo que no se ha producido mucha variación. En el 2017 hubo menos aún, 30.673, pero en esa cantidad influyó que, con motivo de las obras de Capitulares, no todas las cámaras estaban activas -tampoco la del carril bus de Ronda de los Tejares-. Aquel ejercicio sí estaba funcionando el dispositivo de Amador de los Ríos, que fue sustituido por la pilona al final del mismo como medida de seguridad después del atentado de Barcelona. En el cómputo del 2019 no entran los nuevos dispositivos de Tomás Conde y Costanillas, que se activaron posteriormente. Si se divide el número de sancionados entre enero y agosto del 2019, es decir, los 43.416, entre los 243 días que suman esos ocho meses, el resultado es una media diaria de 178 multas, cuando un ejercicio antes era de 174 y en el 2017 fue de 126 (al no estar todos los dispositivos funcionando). Si se analiza el comportamiento de un año entero, se puede observar cómo durante el 2018 hubo 60.291 sancionados, un 13% más que un año antes, lo que supuso una media de 165 al día frente a los 145 del 2017.

Gráfico: Ramón Azañón

Colarse por una zona Acire controlada por cámara conlleva una multa de 80 euros, que se eleva a 200 si la infracción se comete en un carril dedicado a los autobuses y vigilado o circulando delante de la Puerta del Puente en dirección a la avenida del Alcázar. La sanción más elevada, la de 500 euros, se produce cuando un conductor transita ante este mismo monumento de la Ribera pero en sentido contrario, es decir, hacia Ronda de Isasa. Cámaras que vigilan el tráfico en zona Acire o áreas especiales hay, además de las dos nuevas de Tomás Conde y Costanillas, en Valladares, Tendillas, María Cristina -se colocó a raíz de la reordenación por la peatonalización de Capitulares-, Caño Quebrado, San Pablo, y Puerta del Rincón. Los carriles bus/taxi vigilados son los de Ronda de los Tejares, Gran Capitán, avenida de América y Colón. En cuanto a los foto-rojo, se encuentran en San José de Calasanz (hay dos) y en la carretera de Palma (hay otros dos) y están destinados a cazar al conductor que se salte un semáforo en rojo.

UN 30% MÁS EN MARÍA CRISTINA / Del análisis de enero a agosto del 2019 llaman la atención dos hechos. Por un lado, que la cámara de María Cristina ha captado a 1.952 infractores, un 30% más que en el mismo periodo del 2018, cuando hubo 1.498. Casi el mismo incremento registran las sanciones que se han producido por adentrarse en Valladares sin permiso, que han crecido un 28%, pasando de 4.264 a 5.464. Tanto un aumento como otro repercuten en que haya más tráfico en el centro. Curiosa es la subida, del 55%, de las multas que se producen por circular por el carril de los autobuses situado en la avenida de América (se pasa de 839 a 1.305). En cambio, mientras que captan a un 10% de infractores más las cámaras de la Ribera (3.564 frente a 3.249) y de San Pablo (y 8.986 frente a 8.108), en la de Alfaros, paradójicamente, ocurre lo contrario, caza a un 13% menos (12.944 frente a 14.999), por lo que es posible que el tráfico haya mermado algo.