El IES Góngora, un centro con más de mil alumnos repartidos en horario de mañana y tarde, está funcionando con 3 conserjes en lugar de los 6 que le corresponde, según fuentes de la dirección, que reclaman la cobertura urgente de las bajas. De los 5 con los que el instituto estaba trabajando últimamente, «uno se jubiló en diciembre pasado y en septiembre, otro más fue trasladado», explican. Aunque han solicitado a la Consejería la sustitución de las vacantes de conserjes y limpiadoras, «no hay respuesta». Mientras, la falta de conserjes no solo obliga a los docentes a asumir funciones de conserjería sino a abrir solo una de las puertas, «lo que genera colapsos en la entrada y la salida, con el riesgo que eso implica». Los problemas de accesibilidad afectan además a un alumno y un profesor con discapacidad motora, que acuden al centro en silla de ruedas. Al no poder entrar por la misma puerta que el resto, a menudo deben esperar a que alguien les pueda abrir. «Estamos en un centro histórico muy grande que presenta barreras arquitectónicas importantes y eso no se está teniendo en cuenta», lamentan.

La Consejería de Educación responde que «depende de Función Pública cubrir estos puestos» y que les consta que «está en trámite la cobertura de la jubilación» y la «reorganización de recursos para atender de la mejor manera las demandas del centro».