Eva Pozo lleva desde julio como directora general del parque tecnológico Rabanales 21, que hace un año salió del preconcurso de acreedores y sigue inmerso en el plan de viabilidad aprobado entonces. Licenciada en Ciencias Ambientales por la Universidad de Granada, Pozo fue directora de Medio Ambiente en la Fundación Centro Tecnológico Andaluz de la Piedra del 2003 al 2008; gerente de la Agencia Idea en Almería entre 2008 y 2014; y, en los tres últimos años, ha estado dedicada a labores de consultoría y asistencia técnica para la búsqueda de oportunidades de financiación en proyectos de innovación. Uno de sus deseos es que se deje de hablar del parque por sus deudas y que se conozca por la labor de sus empresas.

-¿Qué objetivos se plantea?

-Es una nueva etapa en la que no vamos a olvidar lo que ya se ha hecho. Ahora, superadas algunas dificultades societarias, queremos que el parque sea conocido por sus empresas, que las relaciones con la UCO y la transferencia de conocimiento de la Universidad hacia ellas sea una realidad, y que tengan aquí un sitio donde puedan hacer negocios. Eso queremos potenciar y seguir desarrollando el parque, que sigan viniendo empresas y que hagan posible que haya una comunidad de negocios donde se fomente la competitividad. Quiero que Rabanales 21 sea un centro en el que pasen cosas que interesen a las empresas, que consigamos que los agentes del territorio que trabajan en Córdoba y en la región lo vean como una oportunidad.

-¿Cómo piensa hacerlo?

-Con el equipo ya estamos desarrollando nuestro plan de márketing y queremos contar con los socios. Dentro de nuestra estructura societaria están entidades financieras importantes, la Universidad, el Ayuntamiento, la Diputación y la Junta. Con ellos tenemos mucha capacidad para crear esa concentración de eventos y jornadas que sean interesantes. Queremos empezar con las primeras acciones en este trimestre y, sobre todo, de cara al año que viene.

-¿Cómo ha encontrado el parque tecnológico al llegar?

-Más o menos como esperaba, con un equipo con muchos años de experiencia. Societariamente no están todos los aspectos y todavía hay mucho que hacer porque hay que desarrollar el plano comercial, y esa es una de las tareas en las que vamos a trabajar.

-¿Cuántas empresas y trabajadores hay?

-Hay 66 empresas y unos 400 trabajadores. Los edificios Centauro y Orión están ocupados al cien por cien, mientras que el Aldebarán se encuentra al 99%. Sería interesante tener más edificios de incubación y será uno de los retos que nos planteamos, desarrollar una infraestructura para alojamiento de empresas.

-Había una propuesta en este sentido, ¿qué fue de ella?

-Hubo unas negociaciones hace unos meses y queremos retomarlas con varias empresas. Vamos a sondear cuáles son las necesidades e intentar llegar a un acuerdo con la iniciativa privada. No se sabe si el formato va a ser tipo nave, que no tiene que ser necesariamente para un proceso industrial, sino que puede ser tecnológica, o tipo oficina. En base a eso hay que buscar una alianza para desarrollar el proyecto.

-¿Cuáles son los planes más inmediatos?

-Desarrollar la estrategia comercial y de difusión. Cuando hablo de difusión, hablo de ir mano a mano con las empresas, con la Universidad y otras instituciones del conocimiento y plantear un calendario de acciones que sean interesantes para ellos. Eso es lo que vamos a hacer en este trimestre, dos o tres acciones con las empresas, tipo talleres, seminarios y demás, y desarrollar la política comercial.

-¿Habrá en septiembre consejo y junta? ¿qué temas abordarán?

-Sí. Quedó pendiente la aprobación de las cuentas y hay que terminar de buscar una solución para el tratamiento de la deuda de la sociedad, tema que no está resuelto. Aunque con la ampliación de capital despejamos un poco el horizonte, no está totalmente resuelto y estamos trabajando en las distintas opciones que tenemos para planteárselas a los socios. En las próximas reuniones del consejo y de la junta habrá que adoptar una solución que todos estimen viable.

-¿Qué opciones son esas?

-No hay un abanico de opciones muy amplio. Estamos hablando de capitalización de deuda, de renegociación de la misma, y estamos estudiando los diferentes escenarios desde el punto de vista de la sociedad, de su viabilidad económico y financiera, y de lo que los socios estén dispuestos y puedan hacer. Estamos haciendo un análisis de escenarios y con ello hay que tomar una decisión.

-¿Qué cree que falló para acabar dos veces en preconcurso?

-Ha habido un problema importante de mercado. Hemos estado analizando el mercado y el cambio de las condiciones de financiación de este tipo de proyectos a nivel nacional y todos los modelos de negocio que había de todos los parques fallaron. No ha pasado solo aquí. Todos los parques lo han pasado mal. A unos les pilló con más grado de desarrollo de sus suelos y más comercialización y a otros, en un estado más embrionario. Hemos estado revisando el histórico de licencias de obras en las provincias andaluzas en los últimos años y la caída es espectacular y eso se ha acusado en el parque, donde hay suelos con unas características especiales y la inversión en este tipo de activos no ha sido la prioridad de los últimos años. Toda esa conjunción de circunstancias nos ha llevado donde estamos.

-¿Habrá una tercera vez o Rabanales 21 ha logrado salvarse?

-El horizonte está más despejado con la ampliación de capital y la apuesta de todos los socios, pero no se debe perder el impulso del acuerdo que hubo el año pasado por estas fechas, porque quedan cosas por hacer. Podemos devanarnos en la comercialización, y vamos a hacer todo lo que esté en nuestras manos, pero necesitamos tiempo, que se den las circunstancias de que las empresas, a nivel de mercado, estén dispuestas a invertir. También vamos a necesitar el respaldo de los socios de muchas formas, con la ampliación de capital, con la renovación de la deuda y, también, con un impulso al proyecto, porque las instituciones de promoción económica como el Ayuntamiento, la Diputación o la Junta pueden hacer cosas desde el punto de vista de apoyo a la empresa, de nuestra mano, y a través de instrumentos de financiación de proyectos, atracción de eventos de interés, y eso, al final, cualifica nuestro producto. Los socios financieros tienen también mucho que apoyar aquí, desde el punto de vista de financiar los proyectos que se traigan o algún edificio para albergar empresas. Y la Universidad, lógicamente.

-¿Qué deuda tiene el parque?

-Rabanales 21 debe 9 millones en préstamos participativos a la Junta y la UCO y 2,8 al Mineco.

-¿Ya no hay riesgo de embargo?

-No. Nuestra situación de tesorería es positiva y tenemos tranquilidad para los próximos meses pero hay una deuda importante del préstamo participativo concedido por parte de los socios para la urbanización, que tenemos que atender y en eso estamos trabajando en estos días para buscar una solución buena para las dos partes, ya sea la renegociación, aplazamiento, capitalización parcial o capitalización total. Estamos viendo cuál es la más idónea. Tenemos el encargo del consejo de trabajar en ello y la solución no está encima de la mesa. Ahora en septiembre y octubre se tiene que cerrar. Me gustaría que en esta nueva etapa se hable más de la vida de las empresas del parque que de la situación societaria de la entidad gestora y es una de las cosas que tengo en mente para este trimestre. Me gustaría que intentásemos darle mucho protagonismo a las empresas.

-¿Qué grado de ejecución tiene ya el plan de viabilidad?

-La ampliación de capital ya se hizo y estamos en la tramitación de las escrituras de la dación en pago. Había una parte de incentivos fiscales que está condicionada a que se apruebe la ordenanza en la que está trabajando el Ayuntamiento y que pensamos que puede estimular la oferta del parque. La parte de dinamización y el plan comercial hay que fortalecerla, desarrollarla más, segmentar el mercado, plantearnos objetivos comerciales nuevos ahora que está más receptivo. Está por concretar cómo lo vamos a hacer, pero nos gustaría ir hacia las nuevas tecnologías aplicadas a los sectores agroindustrial y el turismo.

-¿Cómo van los contactos con Urbanismo para la permuta de parcelas?

-Hemos tenido un par de reuniones. Una de las cosas que ocurren en el parque es que los usos del parcelario nos constriñen un poco para determinadas actividades. Había una previsión de suelo industrial inicial que prácticamente se está agotando y lo que estamos viendo con Urbanismo es hasta dónde podemos llegar con los usos globales compatibles. Se trabajó en un documento de una innovación para mejorar la distribución de usos industriales dentro del parque y tener más suelo de ese tipo, que presentaremos en estos días. Y la permuta entra dentro de esa tramitación que tenemos que presentar.

-¿Y con la Junta para la capitalización de deuda?

-Estamos haciendo un análisis de escenarios, viendo si pedir parte de la capitalización, las ampliación de plazo de la deuda..., manejando las distintas opciones en base a un escenario de ventas que creemos realizable. Después, con esas dos o tres opciones que nos pueden salir, que los socios decidan hasta dónde pueden llegar.

-¿Sabe si la Junta está dispuesta a convertir en capital toda la deuda?

-No lo sé. En el plan de viabilidad no se contemplaba como tal. En el plan se dijo que la deuda de los siguientes ejercicios se atendería con los ingresos obtenidos por las ventas pero hasta el siguiente vencimiento había un año y en un año se han conseguido cosas desde el punto de vista comercial, pero no ha habido tiempo como para generar tantos recursos y para ir atendiendo los siguientes plazos además de todos los gastos corrientes de la sociedad. Eso había que modificarlo en la plan de viabilidad o justificar mejor las soluciones para los siguientes plazos que vencían de deuda y, en base a ello, la Junta se debe pronunciar. No se ha pronunciado todavía porque no ha estudiado las opciones que se le proponen. Se habló de capitalización pero hay que concretar en qué porcentaje. La capitalización de la deuda cambia los porcentajes de participación de los socios dentro y eso hay que manejarlo bien para que todo el mundo tenga sus intereses atendidos.

-¿No sería eso lo lógico cuando la Junta tiene más participación en cualquiera de los parques andaluces?

-La Junta debe tener una política en cuanto a su participación en los parques que debe de ser homogénea y, al final, estará en lo que se le requiera. Pero lo que ha hecho no me parece mal, que la solución no venga de una parte solo, sino de todo el mundo. En otros sitios, donde ha habido una distribución de porcentajes con menos predominio de un socio, funciona. Los socios que hay son entidades financieras con importancia en el territorio y eso hace que al proyecto se le dé más repercusión en el sistema productivo. Además, las cajas se preocupan por el desarrollo comercial del parque. El que haya más agentes involucrados en el desarrollo del capital tiene sus ventajas. La Junta lo que ha estado haciendo es intentar que haya una participación más distribuida de todos los socios, pero, hoy por hoy, la deuda más importante que hay es con la Junta, la UCO y el Mineco y van a tener mucho protagonismo en la solución que haya que diseñar para terminar de dilucidar la vida del parque.

-¿La Junta ha dado el visto bueno a la dación en pago?

-Tiene que aprobarlo. Se dio el visto bueno en el consejo de administración pero no se ha escriturado y estamos en el trámite.

-Si se aprueba la capitalización de la Junta, ¿también se pediría a la UCO la del millón aplazado?

-Sí.

-¿Cómo van los contactos con el Gobierno en relación a la deuda con Hacienda?

-Tenemos prevista una reunión con la secretaria de Universidades y una de las cosas que trataremos será esa.

-¿Rabanales 21 cerró la operación con Krasfarma?

-Estamos trabajando con ellos y en estos días cerraremos el contrato y firmaremos. No se ha formalizado totalmente la compraventa y no hemos ido al notario porque estamos poniéndonos de acuerdo en los últimos detalles de la escritura.

-¿Qué otras empresas están interesadas en instalarse?

-Estamos haciendo ofertas a algunas empresas. No hay cosas cerradas pero trabajamos con empresas del sector metalmecánico y con alguna de las que están aquí y quieren crecer.

-¿Qué noticias tiene sobre el centro comercial?

-Tenemos pendiente reunirnos con ellos. Sabemos que están comercializando ese producto.

- ¿Será bueno para el parque?

-El que haya actividad y movimiento en nuestro entorno es bueno. No es nuestro foco, nuestra actividad principal, ni en esa línea vamos a hacer nuevos esfuerzos, pero el que haya movimiento generará más atractivos.

-Parece que hay buenas perspectivas para el parque, ¿no?

-Espero que sí. Parece que a nivel económico se recupera todo lo que se refiere a inversión en suelo, aunque venimos de una situación muy negativa. Aquí estamos haciendo ofertas a cuatro o cinco clientes y que quieran invertir da pista de que hay más confianza y posibilidades de desarrollo y al parque le aclara un poco el panorama. Desde que hace un año los socios lograron ponerse de acuerdo para impulsar el proyecto, vamos todos a una. Creo que las perspectivas son buenas y ahora lo que toca es aprovechar la nueva etapa. Aunque se ha hecho mucho, en los nuevos ciclos hay que coger impulso para intentar relanzar cosas que en momentos en los que había más tensiones no era posible, y hay que cambiar el discurso y la imagen del parque. Esa es la oportunidad que tenemos ahora y hay que aprovecharla. Nueva etapa, alineamiento de socios, y vamos a tomar impulso para relanzar Rabanales 21.