El Grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad de España «confían» en que el Gobierno de Pedro Sánchez atienda su reivindicación de que a estos municipios lleguen «elementos de financiación extraordinarios» para poder cuidar y conservar vivos sus cascos históricos. La alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio, hizo esta reflexión tras la asamblea general del grupo, que reunió en el Museo Nacional de Arte Romano de Mérida a los quince alcaldes de las ciudades que lo integran.

Ambrosio, que dejará su puesto de presidenta del grupo al alcalde de Cuenca, Ángel Mariscal, el próximo 30 de junio, cuando toca el relevo rotatorio, cifró en torno a un 16% el gasto extra que las ciudades patrimonio tienen que soportar para mantener los cascos históricos y prestar los servicios municipales a los vecinos que allí viven. Confió en que el nuevo Gobierno «sintonice» con esta reivindicación, porque «nuestros cascos, nuestras ciudades, no pueden ser parques temáticos», porque «lo que le da alma y lo que le da vida son los vecinos» que allí habitan y que tienen que tener garantizados los mismos servicios que el resto de los habitantes de la ciudad.

«Eso no lo podemos seguir haciendo a pulmón desde las arcas municipales», insistió Ambrosio, para quien el debate sobre el nuevo modelo de financiación tendrá que abordar esta cuestión, ya que los ayuntamientos de las ciudades patrimonio no pueden seguir «infrafinanciados». La alcaldesa de Córdoba dijo que en este debate, que se tendrá que desarrollar en los próximos meses, estas quince ciudades van a ser «reivindicativas y exigentes con que nuestros elementos también se pongan sobre la mesa».