La vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, reclamó al Vaticano, durante su encuentro con el secretario de Estado Pietro Parolin, especial atención para el caso de la Mezquita-Catedral de Córdoba, uno de los inmuebles inmatriculados por la Iglesia, para que se busque una salida «razonable» a su situación. Además, demandó al Vaticano que «reflexione» teniendo en cuenta «toda la complejidad» que rodea a este monumento fundamental para la historia de España y de Europa. «Necesitamos salida particular, completamente razonable no sólo desde el punto de vista de la titularidad, sino también la importancia de la gestión de este monumento», resumió.Respecto a las denominadas inmatriculaciones, Calvo recordó a su interlocutor que la Conferencia Episcopal ha admitido que pudo haber «algún error o exceso» en la lista de inmuebles consignados.