El responsable de Hacienda en el Ayuntamiento, Salvador Fuentes, (PP), ha encargado a la interventora municipal una auditoría de las cuentas municipales, que prevé tener para septiembre y con la que dispondrá de "una foto contable cuantitativa y cualitativa" que "corrija los errores" que, a su juicio, se están cometiendo. Esa auditoría se va a centrar en tres ámbitos. Por un lado, el presupuestario, que, según ha expuesto Fuentes, "comprende la aprobación y estado de ejecución de todos los presupuestos de este mandato, las modificaciones de crédito realizadas en los mismos y las medidas de saneamiento adoptadas, todo lo que sea para contribuir a la eficacia, eficiencia y la ejecución de las cuentas".

En este sentido, Fuentes ha recordado el problema "de gestión" del remanente de Tesorería, que es "sorprendente" y "eso nos preocupa" y "es un debe muy importante que tiene el anterior gobierno".

La auditoría recogerá también los aspectos contables, "los análisis de la liquidación presupuestaria de estos años, de los resultados presupuestarios y del remanente de Tesorería, en los que Intervención ha hecho observaciones". También se tendrán en cuenta, según ha añadido Fuentes, "las obligaciones pendientes de aplicar al presupuesto".

En tercer lugar, la auditoría recogerá la tesorería, la "situación de liquidez en los organismos y el período medio de pago a proveedores". Con este trabajo, Fuentes pretende tener "la foto fija de la situación del Ayuntamiento y de las empresas públicas y organismos autónomos".

En palabras del concejal, la intención del gobierno municipal es establecer unos criterios o "unos mecanismos para que todo el mundo haga el mismo planteamiento procedimental" para evitar varios expedientes pidiendo lo mismo, es decir, "protocolarizar el funcionamiento del Ayuntamiento para agilizar los procedimientos desde arriba hasta abajo para no echarle la culpa a nadie". Fuentes piensa que esos "mecanismos de control y de auditoría" persiguen "evitar los cuellos de botella que se están generando en empresas y organismos por no estar familiarizados con unos papeles contables que sean lo suficientemente ágiles que nos garanticen mayor velocidad a la hora de auditar". El problema es, a su juicio, que "no hay un protocolo transversal de todo el organigrama del Ayuntamiento que garantice procedimientos correctos" y "evite parones".

La auditoría servirá para tomar medidas en ese sentido. La "gestión" es lo que más preocupa al nuevo gobierno de PP y Cs, por lo que, según el concejal, debe haber "ingresos ciertos, ejecución razonable y que las inversiones se realicen y eso supone que toda la maquinaria se ponga a trabajar". Fuentes ha garantizado que Hacienda estará "muy encima" de la ejecución presupuestaria "hasta el último euro del Ayuntamiento".