Una de cada cuatro personas apoyadas por Cruz Roja en la provincia de Córdoba en el marco de su proyecto de atención sociosanitaria a personas que ejercen la prostitución es española, cifra que consolida el repunte de prostitución nacional detectado por la institución humanitaria desde el comienzo de la crisis económica.

Y es que si bien antes de la misma el perfil más frecuente de beneficiaria de este programa era el de una mujer de origen latinoamericano o de Europa del Este, desde hace un lustro la nacionalidad predominante es la española, que representa ya alrededor del 25% de las intervenciones.

Así, durante el pasado año la entidad prestó apoyo a un total de 144 personas (137 mujeres y 7 hombres) dentro de este proyecto, y 37 de ellas eran nacionales, de tal forma que uno de cada cuatro casos correspondió a alguien nacido en España, porcentaje superior al de atenciones de rumanas, colombianas, rusas, ecuatorianas, brasileñas, paraguayas o nigerianas, nacionalidades que en los años anteriores a la crisis estaban por encima en este balance.

Entre las mujeres nacionales atendidas por Cruz Roja, la franja de edad mayoritaria es la comprendida entre los 18 y los 34 años, mientras que entre las foráneas la media de edad es algo superior, entre 35 y 49 años.