La demanda de tratamientos contra todo tipo de adicciones, ya sea sustancias estupefacientes, a máquinas o prácticas nocivas como el juego, redes sociales o apuestas en línea, sigue creciendo en Córdoba. Según el director de Proyecto Hombre, Jesús Tamayo, en lo que va de año se ha duplicado la asistencia a adolescentes y ha aumentado un 20% la atención a adultos respecto al año pasado. Entre los más jóvenes, el uso irresponsable de las nuevas tecnologías están generando un problema de adicción que ha llevado a esta entidad a abrir delegaciones en distintos pueblos de la provincia. Proyecto Hombre dispone de un programa de tratamiento ambulatorio y un programa que incluye internamiento en recurso residencial que se aplica según el perfil de los pacientes. Además, este año se ha habilitado como novedad un programa nocturno con sesiones de terapia a última hora de la tarde dirigido a personas con una estructura familiar y laboral más estable, con la idea de que puedan conciliar su actividad con las terapias de grupo.

El perfil de los usuarios son hombres de entre 20 y 35 años entre los que predomina la politoxicomanía. La drogadicción entre las mujeres, según Tamayo, «sigue estando más estigmatizada por lo que tardan mucho en pedir ayuda y llegan más deterioradas por el consumo prolongado». También alerta del «preocupante incremento de los casos de personas enganchadas al consumo de heroína inhalada en Córdoba». Proyecto Hombre, cuya sede se encuentra en la calle Abderramán III, atiende también a más de un centenar de reclusos de la prisión de Córdoba y a usuarios del centro de inserción social, donde hay personas en lista de espera.

A excepción del programa residencial, donde la atención a los pacientes se da en el marco de una comunidad terapéutica, los tratamientos de Proyecto Hombre (de carácter a confesional) se centran en las terapias de grupo en dos sesiones semanales de hasta 12 personas. El índice de no recaída de los pacientes una vez obtienen el alta médica es del 93%, según el director de Proyecto Hombre.