Ser mujer y viuda es una realidad creciente, vinculada a la mayor esperanza de vida de las mujeres españolas, que puede convertirse en una condena cuando la pensión de viudedad constituye el único ingreso con el que subsistir. En Córdoba existían a fecha 1 de diciembre del 2019, según los datos aportados por el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, un total de 39.408 viudas con pensión reconocida. Algo más del 42% de esas 16.695 mujeres, la gran mayoría mayores de 65 años, subsisten con menos de 600 euros. Hasta poco antes de la crisis, el concepto de mileurista definía a los trabajadores pobres, cuyos sueldos apenas alcanzaban los mil euros. La crisis, la precarización del mercado laboral, la caída de los salarios, la temporalidad y las altas tasas de desempleo que acompañaron a la crisis económica de la pasada década, vigente aún para una parte importante de la población, han revalorizado el concepto del mileurismo, pese a lo cual el umbral de la pobreza se encuentra actualmente en torno a los 622 euros mensuales; por debajo de eso, se es pobre.

Casi la mitad de las pensiones de viudedad, una prestación que es compatible con cualquier renta de trabajo y con la pensión de jubilación o incapacidad permanente, están por debajo de los 600 euros. El 46% de las pensionistas viudas, 18.266 en la provincia, se sitúan entre 600 y 1.000 euros y solo un 12% superan el mileurismo. Actualmente, la pensión de viudedad asciende al 52% de la base reguladora del cónyuge, aunque puede alcanzar el 60% si la viuda es mayor de 65 años, no percibe otra pensión pública, no dispone de ningún ingreso por haber desempeñado una actividad y tampoco dispone de otras rentas de ningún tipo.

Aunque parezca que cada vez hay más personas beneficiarias de esta prestación, lo cierto es que la cifra permanece estable en los últimos años. Contando a hombres y mujeres, el número de viudos que cobran esta forma de pensión es algo superior a las 43.000 personas, si bien desde el 2017 ha experimentado un ligero descenso, pasando de 43.868 a 43.754 al cierre del 2019.

LOS VIUDOS / Las pensiones de los hombres viudos son más bajas. Al igual que las de las mujeres, se calculan en función de la base de cotización del cónyuge, siempre que la otra persona estuviera dada de alta en la Seguridad Social, fuera perceptora de una pensión de jubilación en el momento de morir o percibiera pensión por incapacidad permanente. En total, en la provincia hay 4.345 viudos con esta prestación reconocida, aunque las cuantías son más bajas. El 78% cobran menos de 500 euros.

Cinco viudas cordobesas denuncian las bajas pensiones que se perciben en Córdoba. Foto: SÁNCHEZ MORENO

PENSIÓN MEDIA / La pensión media en Córdoba es de 615,69 euros, según datos de diciembre del año pasado, lo que sitúa a la provincia en el tercer puesto por la cola de toda Andalucía (que destaca en conjunto por rentas y pensiones más bajas que el resto de territorios) después de Granada (606,04) y Almería (603,53 euros). Solo hay dos provincias donde las mujeres viudas vivan en peores circunstancias y ambas se encuentran en Galicia, Lugo, con 517 euros, y Ourense, con 527 euros. En el otro extremo figuran comunidades como Asturias, donde hay más del doble de mujeres viudas que en Córdoba, más de 81.000 y, sin embargo, las pensiones medias están en 814 euros. En el País Vasco, la prestación media actual es de 869 euros para estas mujeres, siendo Vizcaya la provincia con ingresos más elevados por este concepto, algo más de 885 euros mensuales.

Con el melón de las pensiones abierto, a la espera de que el nuevo Gobierno se decida a negociar una reforma que satisfaga a todas las partes, la plataforma en defensa del sistema público de pensiones, movilizada en toda España, sigue reclamando una pensión mínima de 1.084 euros para todos los españoles a partir de 65 años. Además, el año pasado aprobó en asamblea la inclusión de una cláusula de salvaguarda para garantizar el derecho a percibir la pensión íntegra que corresponda al cónyuge fallecido si la viuda no percibe otros ingresos; también defienden que la base reguladora que se aplique para calcular la pensión sea el 100%. Sobre la mesa está el debate sobre el futuro del concepto de pensión de viudedad, que no existe en otros países y que en España se creó para compensar de algún modo a las mujeres que durante años trabajaron en casa, en la crianza de los hijos, sin ningún tipo de cotización a la Seguridad Social, ya que a la muerte del cónyuge quedarían sin ningún tipo de ingresos.

El cambio del mercado laboral y la incorporación de la mujer al empleo podría afectar de cara al futuro a las pensiones de viudedad. Según miembros de la plataforma en defensa de las pensiones, «si todo el mundo tiene derecho a una pensión mínima a partir de los 65 años de 1.084 euros, esta pensión de viudedad no tendría sentido al menos en esa franja de edad». Otros, entre ellos altos cargos del Gobierno de Sánchez, ya plantearon en la pasada legislatura que la pensión de viudedad se conceda en función de la renta de la persona que quede viuda.