Los empleados públicos andaluces recibirán en la nómina de febrero el importe equivalente al último tramo de la paga extra suprimida de 2012, una medida con un impacto económico en unos 120 millones de euros, según informó ayer un comunicado de la Junta de Andalucía. Este pago correspondiente a 45 días supone una media de 400 euros más en las retribuciones del próximo mes para los 250.000 empleados públicos de la administración autonómica. Esta devolución, prevista en el presupuesto de Andalucía para 2018 y que publicó ayer el BOJA, es el cuarto y último abono de la extra pendiente. El Gobierno andaluz culmina así su compromiso, contraído con los sindicatos en junio de 2016, de restituir los derechos suspendidos a los trabajadores como consecuencia de los recortes impuestos por el Estado en 2012. Con este abono se completa la devolución de la extra de 2012, tras los 46 días que se abonaron en el mes de febrero de 2017, los 44 días que se abonaron en febrero de 2016 y los 48 días que se pagaron en septiembre de ese mismo año.

Podemos Andalucía se congratulado ayer de que los empleados públicos recuperen la extra perdida, pero recordó que hay «muchos derechos» en este colectivo de trabajadores que «están por volver».