El presidente andaluz, Juanma Moreno, acusó ayer a la Generalitat de «marginar» a los andaluces residentes en Cataluña y advirtió de que no permitirá que se «pisoteen y ninguneen» los derechos de esos ciudadanos, sin descartar acudir a la vía judicial si es necesario. Moreno se reunía durante la mañana en Barcelona con la Federación de Entidades Culturales Andaluzas y, posteriormente, participó en Tarrassa (Barcelona) en el Día de Convivencia Andaluza.

El presidente de la Junta aseguró que su Ejecutivo tiene «muy claro» que debe estar «muy cerquita y al lado de los andaluces que emigraron en los años 60 y 70», que en el caso de Cataluña cifraba en «más de medio millón de catalanes de origen andaluz.Por mucho que haya un Govern claramente independentista, que quiere marginar a esos catalanes de origen andaluz, el Gobierno de Andalucía va a ser dique de contención y contrapeso. Vamos a venir y exigir que se respeten los derechos de los andaluces y se respeten sus tradiciones y su cultura», subrayó.

El presidente de la Junta detalló que ese apoyo se plasmará en una presencia «mucho más decidida y permanente» en Cataluña, pero también «asesorando, apoyando e incluso recurriendo judicialmente cualquier decisión que afecte a los andaluces residentes en Cataluña».

Además, aseguró que su gobierno dará «amparo, cobijo y servicio de orientación», ya sea desde «asesoramiento jurídico, legal o social, para que nadie se sienta ninguneado o marginado por la deriva independentista en Cataluña». Moreno anunció que la Junta trazará un «plan» para que las comunidades andaluzas en el exterior, especialmente en Cataluña, la «más numerosa y la que más problemas tiene», tenga apoyo del Gobierno andaluz.

En esa línea avanzó que se intentará establecer una «nueva línea de ayuda» para entidades como las que ayer visitó, que «al final son embajadas de Andalucía que trasladan nuestra cultura, manera de pensar e imagen». Moreno recordó que él nació en Barcelona y fue hijo de la inmigración: fueron muchos los andaluces que buscamos acomodo, progreso y bienestar en Cataluña. Algunos volvimos y otros se quedaron. Los que se quedaron necesitan cobijo, apoyo y respaldo de su Gobierno. Y lo van a tener. Van a tener un Gobierno amigo».

Pero el dirigente popular aseguró, asimismo, que «los lazos de fraternidad, amistad y unión entre Cataluña y Andalucía nadie los puede romper, son inquebrantables», concluyó.