La llegada del coronavirus ha cambiado el estilo de vida del mundo, así como de los vecinos de los ocho municipios de la comarca del Alto Guadalquivir, desde Adamuz hasta Cañete de las Torres, pasando por Bujalance, El Carpio, Pedro Abad, Villafranca, Montoro y Villa del Río, así como sus diferentes aldeas --Morente, San Antonio, Maruanas--, y la entidad local autónoma de Algallarín. Los ciudadanos están confinados, una palabra y un estado de vida que se ha asentado como de la noche a la mañana, cuando hemos ido viendo que el número de contagios y muertes iba sembrando el pánico entre la población.

Nada tiene que ver con lo de antes. Las formas de vida han dado un giro de 360 grados mientras la covid-19 esté presente en nuestras vidas.

Los pueblos del Alto Guadalquivir, aunque se han comportado extraordinariamente ante la pandemia, no han sido ajenos a ese dolor que se ha apoderado del mundo, personificado en las miles de personas que han perdido la vida, sobre todo las más vulnerables -mayores y enfermos con enfermedades crónicas-.

Pero la reacción de los ciudadanos del Alto Guadalquivir ha sido ejemplar, hasta el punto de que apenas se han registrado contagios, según los datos de la Junta de Andalucía: Adamuz (2 contagiados y 0 fallecidos), Bujalance (8 contagiados y 0 fallecidos), Cañete de las Torres (1 contagiado y 0 fallecidos), El Carpio (2 contagiados y 0 fallecidos), Montoro (6 contagiados y 1 fallecido), Pedro Abad (3 contagiados y 0 fallecidos), Villa del Río (3 contagiados y 0 fallecidos) y Villafranca (2 contagiados y 0 fallecidos).

Aunque la Junta de Andalucía da como dato un fallecido de Montoro, lo cierto es que las autoridades civiles no lo tenían contemplado, pero todo apunta a que puede deberse a un ciudadanos de otra provincia que sea natural de Montoro y que haya causado muerte por esta pandemia.

Por otro lado, durante estas últimas semanas se han producido algunos fallecimientos de personas mayores en los distintos municipios de la zona, pero al no poder contrastar el motivo del fallecimiento debido al no hacerse test ni pruebas, la duda está en si ha podido ser por coronavirus o por otra causa.

No obstante, a pesar de esta ola de contagios y fallecimientos, la comarca del Alto Guadalquivir, perteneciendo al Distrito Guadalquivir, con 124.0207 habitantes, el número de contagiados ha sido de 56 y el de fallecidos, 5, unque está representada por toda la vega, incluidos municipios como Valenzuela, La Carlota, fuente Palmera, Fuente Carreteros, SAn Saebastián de los Ballesteros, obejo, Villaharta, e incluso el pueblo sevillano de Peñaflor, donde ha fallecido una persona.

Debido a esta situación, los alcaldes de los ocho municipios del Alto Guadalquivir se sumaron al estado de alarma decretado por el Gobierno de España el 16 de marzo con el objetivo de hacer frente a la pandemia, y se va superando.

Muchas han sido las acciones de desinfección, limpieza y solidaridad que, de forma espontánea, han ido surgiendo en los ocho pueblos, aldeas y entidad local autónoma, poniéndose en marcha diversas medidas para el confinamiento y al mismo tiempo planes de choque para poder hacer frente a esta crisis sanitaria que está desembocando en una de las peores crisis económicas de la historia.

Bares, restaurantes, tiendas y comercios se han visto obligados a cerrar, a excepción de los supermercados de productos de primera necesidad y farmacias.

El pánico se ha apoderado de una población que estaba saliendo de una crisis financiera que poco a poco iba viendo la luz al final del túnel. No obstante, gracias al positivismo y el optimismo, así como a la solidaridad, esta nueva crisis global se va a superar, pero puede ser un toque de atención hacia las grandes potencias mundiales, así como a las personas y fabricantes que están atentando contra el medio ambiente. Ahora, más que nunca también, el sector sanitario ha aumentado su importancia como gremio que está haciendo frente a una pandemia sin precedentes.

Tras las semanas más duras del confinamiento, el Gobierno de Pedro Sánchez ha iniciado un nuevo proceso de desescalada en varias fases, que harán que los vecinos de la comarca del Alto Guadalquivir vayan alcanzando la normalidad en sus vidas

Tras la apertura de una hora al día para los menores de 14 años, acompañados de sus padres, ahora le seguirá la práctica del deporte en individual y militado, la apertura de locales con cita previa de clientes, y desde el 11 de mayo, la apertura del pequeño comercio, horario preferente para mayores de 65 años, apertura de terrazas y hoteles, lugares de culto y sector agroalimentario.