El presidente de Urbanismo, Pedro García, considera que la reforma, «desde el punto de vista práctico, nos va a ayudar lo suficiente para que algunas parcelaciones puedan tener servicios básicos», pero no todas. Por ello, considera que «el problema de Córdoba es que la mayoría de las parcelaciones no están en esa fase de desarrollo», es decir, que no han llegado a la etapa en la que pueden acceder a esos suministros, que es cuando tienen proyecto de reparcelación y urbanización, por lo que, hay que «ayudar a esas parcelaciones para que tengan la posibilidad de tener ese desarrollo final, que es el que les va a permitir tener servicios básicos». En las redes sociales, dijo que «pondremos toda la carne en el asador para dotar de servicios básicos a las parcelaciones, la ley nos debe ayudar».
En la capital, ninguna urbanización cumple hoy las condiciones para que sus casas logren permisos provisionales que permitan que las suministradoras concedan antes los enganches, pero hay 15 con 3.900 viviendas en suelo urbano y urbanizable, que tienen los trámites más avanzados al haber llegado a la fase de reparcelación y urbanización o a alguna de ambas. Esos 15 núcleos representan el 15% del más del centenar de parcelaciones existentes en total y el 35% de las 43 que están en suelo urbano y urbanizable. En esa situación están El Sol, El Cruce, Cuevas de Altázar, Santo Domingo, La Colina, Doña Manuela y Las Corralitas, Torreblanca, Barquera Sur, Barquera Norte, Cortijo El Rubio, La Gorgoja-El Marroquil, Alamillo, Montón de la Tierra, Carretera de Encinajero y Santa Ana de la Albaida.
Un hándicap es la protección e inundabilidad. De 4.119 casas de no urbanizable, el 79% tienen ese problema, de ahí las dificultades para el AFO. H
