Los sindicatos convocantes de la jornada de protesta de ayer, particularmente CCOO y UGT, destacaron el amplio seguimiento de la jornada de huelga en el ferrocarril en Córdoba, en donde la convocatoria tuvo un seguimiento similar a la media de España, en torno al 90%, según explicó ayer Fernando López Padillo, delegado de CCOO en Renfe en Córdoba.

Al respecto, a primera hora de la mañana de ayer una concentración de trabajadores en huelga rodeó la estación de Córdoba, llegando a cortar unos minutos las calles aledañas aunque sin registrarse más incidentes destacables y, todo ello, ante una notable presencia policial.

López Padillo, eso sí, lamentó que los "abusivos" servicios mínimos, unidos a que parte de la plantilla está de vacaciones y a los turnos de descanso, impidieran a más trabajadores de Renfe y Adif en Córdoba (aproximadamente 300 trabajadores de cada empresa) secundar la protesta de ayer.

De hecho, los servicios mínimos contemplaba la circulación de un 73% en trenes AVE y de larga distancia, quedando en un 65% para los interurbanos. Según el representantes de CCOO, esta cifra de trabajadores obligados a servicios mínimos ha llegado al 100% de la plantilla en algunas provincias.

MALESTAR EN "EL SENTIR" Juan Martínez, secretario de organización de la federación de transportes de UGT, fue más allá y, además del seguimiento de la huelga por parte de los pocos trabajadores que no cumplían servicios mínimos, destacó "el sentir" que ha transmitido la protesta, reflejo del malestar que se vive ante los proyectos de dinamitar en varias empresas Renfe y Adif como parte del plan para liberalizar el sector.

Al respecto, también el delegado de CCOO, Fernando López dio cuenta de lo delicado de la situación, con la amenaza de Renfe de ser dividida en cuatro "subempresas", una fórmula que el pasado viernes "nos quedamos fríos cuando también se planteó para Adif".