Por el delito de detención ilegal se puede imponer una pena de hasta 10 años de cárcel y por simulación de delito, multa de 6 a 12 meses. En este asunto, el delito de detención se habría cometido sobre dos personas.

El supuesto caso de Bretón encajaría en el artículo 166 del Código Penal, que habla del "reo de detención ilegal o secuestro que no dé razón del paradero de la persona detenida (...)".