La Junta de Andalucía no consiguió, finalmente, el consenso de los partidos políticos. La consejera de Economía valoró que "hay aspectos del decreto ley que tienen que ver con las propuestas de la oposición, aunque no ha sido posible el acuerdo total porque en estos momentos no podemos entrar en cuestiones que cambian elementos de reparto de cuotas de poder. Este no es el objetivo de este decreto". Pese a que la norma pasará para su convalidación por el Parlamento, ya no hay margen para ser modificada con las propuestas de los grupos y, de hecho, su publicación en el BOJA será inminente.

El presidente del PP-A, Javier Arenas, criticó ayer la "irresponsabilidad" del Gobierno andaluz al poner "en riesgo" la fusión entre Unicaja y Cajasur por no respetar el protocolo firmado entre ambas cajas, y advirtió de que lo peor que puede hacer es aprobar un decreto ley "sin consenso". Arenas lamentó que no se haya podido alcanzar un acuerdo sobre esta materia, por lo que plantea que la reforma de la Ley de Cajas se remita al Parlamento como proyecto de ley. Por su parte, el líder andaluz de IU, Diego Valderas, denunció que el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, intenta limitar el papel público de las cajas en la reforma de la ley. Añadió que la Junta no ha negociado con su formación la reforma de la ley y se ha limitado a rechazar sus propuestas.