La casta política va a permitir que los interinos que lleven más de 10 años en sus puestos no necesiten oposición. Ahora hay que preguntarle qué les parece dicha medida política a todos los que se han partido el pecho estudiando para aprobar unas oposiciones. ¿Dónde está la explicación? Pues en que la burrocracia de la casta, que representa lo peor de la sociedad con mucha diferencia, no puede permitir que nadie le haga sombra y de ahí su empeño en castigar a los buenos y premiar a los malos. Pues nada, si eliminamos el incentivo personal y una mínima meritocracia, dentro de muy poco estaremos aquí, como en la fracasada Unión Soviética. ¡Sálvese quien pueda!.