El grupo yihadista Estado Islámico (EI) ha destruido el monasterio más antiguo de Irak, según se ha podido confirmar gracias a las imágenes de satélite obtenidas por la agencia Associated Press (AP). Los expertos que han visionado y analizado las fotografías opinan que el edificio, el Deir Mar Elia, el Monasterio de San Elías, de unos 1.400 años, fue totalmente derruido en el 2014.

La destrucción del bello edificio, situado en una colina cercana a la ciudad de Mosul, en el norte de Irak, se produjo probablemente entre agosto y septiembre del 2014, dos o tres meses después de que los yihadistas tomaran la localidad. Así lo sugieren las imágenes de satélite, según indicó a AP Stephen Wood, del grupo Allsource Analysis, que cuenta con expertos en imágenes e información geoespacial.

MUROS PULVERIZADOS Las fotografías de satélite estudiadas mostraron "que los muros de piedra fueron literalmente pulverizados", señaló Wood. "Excavadoras, equipo pesado, almádenas y seguramente explosivos convirtieron estos muros de piedra en este campo de polvo gris y blanco. Lo destruyeron completamente", recalcó.

El EI ha atacado a las comunidades cristianas de Irak y Siria, ha obligado a sus miembros a convertirse al islam o a pagar impuestos especiales por ser cristianos, a huir o los ha asesinado, torturado y violado.

Además, ha demolido muchos monasterios e iglesias, algunos de incalculable valor, como el de San Elías. Solo en la zona de Mosul y los pueblos predominantemente cristianos que rodean a esta ciudad, como Bashiqa y Qaraqosh, el EI ha borrado del mapa más de 100 edificios religiosos cristianos desde mediados del 2014.

También ha destruido total o parcialmente algunos yacimientos arqueológicos considerados entre los más importantes del mundo como Nimrod, Nínive (Irak) y Palmira (Siria). El pasado octubre, dinamitó el Arco del Triunfo de Palmira, de casi 2.000 años de antigüedad. En marzo, arrasó más del 50% de la ciudad de Nimrod, fundada hace más de 3.300 años y capital del Imperio Asirio, y previamente destruyó piezas muy importantes del Museo de la Civilización de Mosul que consideraba "símbolos de idolatría pagana".

A diferencia de otras ocasiones, el EI no ha grabado la destrucción del edificio de San Elías, cuya construcción se atribuye a monjes asirios a finales del siglo VI. Posteriormente fue reivindicado por una orden católica caldea. En 1743, los monjes que lo habitaban recibieron un ultimátum de las fuerzas persas para convertirse al islam, pero al negarse a hacerlo, al menos 150 fueron ejecutados.

En los años 70, el monasterio se convirtió en una base de la Guardia Republicana Iraquí y en el 2003, uno de sus muros resultó dañado por el impacto de la torre de un tanque T-72 alcanzado por un misil durante la invasión estadounidense de Irak.

Después del ataque de EEUU, el Ejército americano usó el monasterio como base hasta que un capellán castrense reconoció su importancia y los militares lo evacuaron.

San Elías "se convirtió en un lugar espiritual de visita para los cristianos y para celebrar ceremonias y pedir perdón al santo que fundó este monasterio", explicó a la cadena británica BBC el padre Paul Zabit Habib, un cura católico de Mosul que ahora vive en Erbil, en la zona del Kurdistán iraquí.

"El monasterio atraía a toda la gente de Mosul, cristianos y musulmanes. Todos los poetas, historiadores y viajeros escribieron sobre este monasterio. Se convirtió en un lugar muy importante para la historia de la Iglesia en Irak", dijo el sacerdote.

La historia cristiana en Irak, según Habib, "se está demoliendo de forma bárbara". "Lo vemos como un intento de echarnos de Irak, de eliminar, de acabar con nuestra existencia en esta tierra", afirmó.

CAMPAÑA MILITAR La coalición internacional contra el EI considera que la campaña militar empieza a cosechar sus frutos provocando el retroceso de los yihadistas, por lo que cree que ha llegado el momento de iniciar una nueva fase e intensificar el combate para golpear el núcleo duro de la organización: sus centros de poder en Mosul y Raqqa.

Los ministros de Defensa de los siete países más implicados en los bombardeos contra el EI (EEUU, Francia, Alemania, Reino Unido, Australia, Italia y Holanda) se reunieron ayer en París para trazar la estrategia a seguir. "Es el momento de incrementar nuestro esfuerzo poniendo en marcha una estrategia colectiva coherente", señaló el titular galo de Defensa, Jean Yves Le Drian.

El gran ausente de la cita que se efectuó en París fue Rusia, a quien se le pidió dejar de bombardear a los rebeldes opuestos a Damasco.