En el año 1970 los vecinos de la aldea carpeña de Maruanas cultivan la costumbre de acompañar la procesión de San José Obrero el 1º de Mayo con carrozas de tema predominantemente agrario. Eran el fruto de una genuina dedicación al exorno de carromatos que dio ejemplos tan entrañables como el de esta fotografía, en la que posa un grupo de jóvenes ataviadas para el desfile.