La salida de Elma Saiz acerca una moción de censura en Pamplona

La elección de la concejala socialista Elma Saiz para formar parte del tercer Gobierno de Pedro Sánchez ha monopolizado este lunes la actividad del Ayuntamiento de Pamplona, donde el nombramiento ha alimentado todo tipo de comentarios y conjeturas sobre sus efectos en una posible moción censura de las formaciones progresistas, que algunos dan como segura tras la salida de la portavoz municipal del PSN hacia la sede del Ministerio de la Seguridad Social en Madrid.

Fue ella la que repitió sin descanso durante la campaña electoral que los votos de los socialistas no iban a servir para hacer alcalde ni a Joseba Asiron ni a Cristina Ibarrola, aunque al final sí que resultaron decisivos para que la regionalista accediera a la Alcaldía como candidata de la lista más votada (el PSN votó en blanco, mientras EH Bildu, Geroa Bai y Contigo respaldaron a Asiron).

La política tiene estas paradojas, sus ritmos propios, y ahora se convierte en ministra gracias a los acuerdos con distintas formaciones, entre ellas EH Bildu, con los que hace un tiempo fue imposible llegar a un acuerdo.

Habrá que ver que depara el futuro y si la parálisis que sufre el Ayuntamiento dura mucho más tiempo, pero el líder de la izquierda abertzale, Arnaldo Otegi, que nunca habla más de la cuenta, no ha descartado este lunes que haya una moción de censura en Pamplona.

En todo caso, ha precisado que de momento, “no está encima de la mesa” activar el procedimiento, “pero podría ser uno de los instrumentos” porque pronto se va a debatir el proyecto del presupuesto en el Ayuntamiento, y se ha preguntado si en Pamplona van a aprobarse las cuentas públicas de UPN.

Que Elma Saiz deje el Ayuntamiento puede allanar el camino hacia una moción de censura, coinciden en señalar varias fuentes, incluidos cargos de responsabilidad de UPN, para quienes la promesa de la portavoz socialista de no apoyar a Asiron era uno de los pocos argumentos que evitaran lo que parece inevitable dada la composición del Ayuntamiento (16 concejales de las formaciones progresistas frente a los 11 que suman UPN y PP).

Aunque nadie se atreve a hacer pronósticos, resulta claro que el movimiento tendrá consecuencias y la primera tiene que ver con el grupo municipal socialista, cuyos integrantes, a excepción de Elma Saiz, se encontraban en el despacho preparando las comisiones de la semana cuando han conocido que Elma Saiz iba a ser ministra.

El futuro del grupo municipal

Xabier Sagardoy, Marina Curiel, Eloy del Pozo y Nuria Medina estaban pletóricos, con los teléfonos sonando sin cesar y la visita de algunos compañeros corporativos para felicitarles por la elección de su compañera.

Tomás Rodríguez Garraza, quien figura en el sexto lugar en la lista del PSN en Pamplona, será el sustituto de la futura ministra, aunque falta por resolver quién dirigirá la actividad del grupo municipal en ausencia de Elma Saiz y con los retos que se presentan por delante en los tres años y medio de legislatura que restan.

Lo normal es que fuera el número 2, Xabier Sagardoy, que además es el que más conocimiento tiene de la actividad municipal, pero no es descartable que la dirección del partido prefiera a otra persona para el puesto.

Elma Saiz no ha acudido en toda la mañana al despacho del grupo municipal. La última vez fue el viernes pasado, el día después de la votación de investidura en el Congreso que dio la mayoría a Pedro Sánchez. Al término de la jornada los socialistas compartieron con los concejales de la oposición –no estuvieron todos– un refrigerio.

Aseguran que no se habló de la moción de censura ni del futuro de Elma Saiz, aunque unos pocos ya sabían entonces que Pedro Sánchez la había incluido en la lista definitiva de ministros.