El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont volvió este lunes a su trabajo como eurodiputado en el Parlamento Europeo tras ser detenido el pasado jueves en Cerdeña (Italia) y pasar el fin de semana en la isla, y reiteró que, pese a la dificultad de las conexiones y el hecho de que coincida con el pleno de la Eurocámara, acudirá a declarar en persona el próximo lunes.

En declaraciones a la prensa en la Eurocámara, Puigdemont señaló que viajará a la isla italiana para acudir a la audiencia de forma presencial el 4 de octubre, como le ha requerido la jueza, y se declaró “preparado” para afrontar esa audiencia, en la que se decidirá sobre su posible entrega a España.

“Como se pueden imaginar no es sencillo porque las conexiones no son fáciles y coincide con semana de pleno, pero iré y será ella (la jueza) quien deba tomar la decisión. Estamos preparados para afrontar esta audiencia”, subrayó antes de entrar en la sala de la reunión a la que asiste esta tarde.

Puigdemont acudió a la reunión de la comisión de Comercio Internacional en la sede del Parlamento en Bruselas este lunes poco antes de las 17.00 hora local tras aterrizar esta mañana en el aeropuerto de Zaventem, si bien no asistió previamente a la de la comisión de Transporte, en la que es miembro suplente.

De esta manera, Puigdemont retoma "la agenda que tenía prevista", como él mismo dijo a la prensa a su llegada esta mañana al aeropuerto de Zaventem.

Según relató en su cuenta de Twitter, durante el vuelo de vuelta obtuvo el apoyo de “una pareja española” que viajaba en el mismo avión, aunque a su llegada a Bruselas se encontró con unos españoles que “le empezaron a gritar como energúmenos”.

A su llegada al Parlamento, aseguró además que “no está al día” sobre la presentación por parte de sus abogados de un recurso ante el Tribunal General de la Unión Europea para pedir que se le devuelva la inmunidad, un escrito que su defensa continúa preparando después de que la justicia comunitaria confirmara en julio la decisión de retirarles este privilegio.

Los jueces dieron la oportunidad a Puigdemont y los otros dos eurodiputados de JxCat, Toni Comín y Clara Ponsatí, de volver a pedir medidas cautelarísimas en caso de que fueran detenidos, como ocurrió el pasado jueves cuando el expresidente catalán llegó al aeropuerto de Alguer.

Los jueces retiraron la inmunidad a los tres políticos porque consideraron que no corrían riesgo de ser arrestados, dado que entendieron que las órdenes de detención estaban suspendidas.

Este será uno de los principales argumentos que contendrá la nueva demanda de Puigdemont ante el TGUE, según explicó el viernes su abogado Gonzalo Boye, encargado de coordinar la estrategia judicial.

También defenderán que el expresidente catalán continúa gozando de inmunidad parlamentaria para poderse desplazar a las reuniones de la Eurocámara y ejercer como eurodiputado.