Pablo Casado reunirá mañana a su comité ejecutivo nacional, que incluye a su núcleo duro y también a los barones territoriales. El líder del Partido Popular concretará los principales ejes de la campaña y podrá escuchar las primeras sugerencias sobre los primeros puestos de las listas. Casado, admiten en la dirección, «tomó nota» de las críticas desatadas la pasada primavera, cuando la «renovación» que planteó se vio como imposición y purga por algunos políticos con peso en los años de Mariano Rajoy.

Ahora quiere trasladar su nuevo estilo templado también a la elaboración de las listas y hará algunos «ajustes», como le reclama el presidente de Andalucía, Juan Manuel Moreno. El jefe del Ejecutivo andaluz está incómodo con algunas decisiones para las generales del 28 de abril, entre otras, la elección de Juan José Cortés como número uno por Huelva en lugar de la exministra (y sorayista, como él, en su momento) Fátima Báñez.

El PP está obligado además a hacer importantes cambios en la lista por Madrid porque algunas de las personas con puestos destacados se fueron a instituciones gobernadas por el PP. Es el caso de Andrea Levy (número 6), actual concejala en el Ayuntamiento de Madrid, y Javier Fernández Lasquetty (10), consejero madrileño de Hacienda.