El ministro de Justicia, Rafael Catalá, afirmó ayer que si en Cataluña se convocan elecciones fuera del marco legal, el Gobierno procederá a su impugnación, pero añadió que no parte "de una desconfianza de que se vaya a producir una convocatoria que no respete el marco jurídico actual".

En declaraciones a los medios, Catalá aclaró que las elecciones que se convoquen "no serán plebiscitarias" porque "no puede haber otro formato distinto" que los comicios para elegir diputados al Parlamento catalán.

"Hay cierta confusión de si es plebiscitaria, como si lo que se fuese a elegir es otra cosa", afirmó, y en ese sentido indicó que desde la Abogacía del Estado estarán atentos por si hay alguna ilegalidad en su convocatoria.

"Si hay algún incumplimiento de la normativa lógicamente procederemos a su impugnación, pero no parto de una desconfianza de que se vaya a producir una convocatoria que no respete el marco jurídico actual", dijo.

"MANIOBRA DE CONFUSION Por su parte, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, reiteró ayer que los próximos comicios catalanes serán "unas elecciones autonómicas" más pese a las "maniobras de confusión" que se quieran generar, en alusión a la lista conjunta pactada por CDC y ERC avalada por entidades soberanistas.

"Estas son unas elecciones autonómicas para elegir un Parlamento autonómico y para nada más", recalcó el jefe del Ejecutivo, quien insistió en que conviene no generar confusión con las afirmaciones de unos y otros, con los pactos o con las listas.

Tras señalar que el PP se presentará como lo que es, el Partido Popular, reiteró que él no iba a entrar en "maniobras de confusión" ante unas elecciones que dijo que se atendrán a lo que dice el Estatuto de autonomía catalán. Ante ellas, garantizó que el Gobierno hará cumplir las leyes y el Partido Popular defenderá la Constitución, la soberanía nacional y el derecho de todos los españoles a decidir lo que quiere que sea su país.