Demoledor. Así pretendió ser el ataque de Mariano Rajoy en Bilbao al Gobierno central, al que presentó "superado por la realidad" económica. El líder del PP consideró "inaceptable" que el vicepresidente Pedro Solbes haya declarado que el Ejecutivo "carece" ya de margen frente a la crisis, y espetó: "Cuando un político se queda sin ideas, lo más patriótico es quitarse de enmedio". Rajoy dijo tener solo miedo a la "ineficacia e incompetencia del Gobierno de España", que, según él, se ha dedicado a gastar "a troche y moche".

La secretaria de organización del PSOE, Leire Pajín, replicó en unas declaraciones a ´Efe´ que el PP está "preso de una crisis de liderazgo" y que por eso afronta las elecciones europeas "con el retrovisor" puesto en la época de Aznar. La dirigente socialista afirmó que los populares, "faltos de alternativas", se limitan a "mirar hacia atrás, a volver al pasado". Según Pajín, quien marca la agenda del PP no son los ciudadanos ni los intereses de España, sino "los líos internos" del partido entre los "aspirantes eternos" a suceder a Rajoy.