El candidato de Ciudadanos, Albert Rivera, sabe que solo con una alta participación, que él estima en al menos el 80%, su partido puede convertirse en la fuerza decisiva que tendrá la llave de la gobernabilidad. Por eso, Rivera está apelando tanto a los votantes indecisos ("a la gente normal", como dijo en su mitin central de Vistalegre). Ayer incluyó a los jóvenes en el mensaje.

El cara a cara televisivo entre Rajoy y Pedro Sánchez, su formato y sus formas, le han allanado el terreno. "El que todavía no sabe qué votar, que vuelva a ver el debate y lo que verá es lo que no necesita España", clamaba en una entrevista a Onda Cero.

En una visita a Guadalajara, programada a última hora, sin mitin pero con paseo por las calles del centro urbano, Rivera atacó a la "vieja política" y reprochó al PP y al PSOE que intenten "engañar a la gente" diciendo que su partido pretende "eliminar pueblos" de la geografía española. "Me parece un intento, con poco éxito, por parte de los viejos partidos", de "mantener la burbuja política, los cargos de confianza y las estructuras que luego hacen que tengamos que pagar más impuestos y más IBI", declaró entre saludo y saludo.