Los centros educativos cooperativos de economía social, agrupados en Andalucía en torno a la asociación ACES, celebraron la pasada semana en el colegio Ferroviario de la capital cordobesa un encuentro provincial donde se analizaron los retos «de la otra concertada». Así lo señalaban en una nota de prensa donde explicaban que el colectivo «aspira a desmarcarse de la idea única que tiene mayormente la sociedad sobre la educación concertada donde solo se piensa en los centros religiosos». Este tipo de enseñanza de economía social cuenta con tres décadas de existencia y en Andalucía aglutina a 147 centros educativos, con más de 3.000 profesores y una comunidad educativa superior a los 40.000 alumnos. Según el presidente de ACES, José Luis Hervás, esta «otra concertada sigue luchando por hacerse ver y, sobre todo, porque la sociedad le conceda el sitio que le corresponde por su extraordinaria contribución al bien común». A esto añade que desde la Consejería de Educación se han iniciado proyectos educativos de emprendimiento que tienen su origen en proyectos que ya hacíamos en nuestros colegios desde hace décadas». «Nosotros trabajamos los valores universales y el concierto es la herramienta administrativa para financiarnos, pero somos otra cosa diferente», explica Hervás, quien añade que existe «una escasa visibilidad de nuestros centros y de la importante labor que realizan en la sociedad».

El modelo empresarial de estos colegios es idéntico al de cualquier otra cooperativa, «la forma de entrar es a través de una aportación de capital y una vez dentro, tras un periodo previo de prueba, todos son socios cooperativistas con los mismos derechos, lleven el tiempo que lleven» asegura Hervás.