Cambios

Indra amplia el número de consejeros para evitar una opa del Estado

La compañía entrada a un miembro de Amber Capital, Pablo Jiménez de Parga, secretario del consejo de administración de Prisa

Indra amplia el número de consejeros para evitar una opa del Estado.

Indra amplia el número de consejeros para evitar una opa del Estado.

Juan Carlos Lozano

Indra, empresa participada por el Estado, ha dado un último paso para cerrar un polémico proceso de cambios y ceses en el consejo y en el organigrama ejecutivo. Tras la modificación decidida en las últimas horas, Indra elimina la oposición interna en el consejo, mantiene el equilibro entre los independientes y los ejecutivos y dominicales, y consigue así un objetivo fundamental: evitar que el Estado, que controla un 28% del capital, tenga que lanzar una opa por el 100%. De esta manera, Indra podrá centrarse en el nuevo plan estratégico que debe llevarla a transformarse en un campeón nacional y un actor relevante en la industria de Defensa europea. El consejo de administración de la compañía llevará el próximo 30 de junio una propuesta para situar a Pablo Jiménez de Parga, secretario del consejo de administración de Prisa, como consejero dominical en representación de Amber Capital. También se propondrá como consejeras independientes a María Ángeles Santamaría Martín y Elena García Armada. De esta forma, aumenta la presencia femenina en el consejo de la compañía hasta llegar al 37,5%.

La vallisoletana Elena García Armada es una ingeniera industrial española fundadora y presidenta de Marsi Bionics, una empresa de base tecnológica nacida como spin-off de del CSIC mientras que María Ángeles Santamaría Martín, también ingeniera industrial, es exconsejera delegada de Iberdrola.

Indra ha decidido ampliar su consejo de administración para afrontar la entrada en el órgano de administración del representante del fondo Amber Capital (liderado por Joseph Ourghulian, presidente y primer accionista del Grupo Prisa), que tiene una participación superior al 7% (7,2%) y que sustituiría en el consejo al alemán Axel Arendt, que dimitió la semana pasada tras el nombramiento de José Vicente de los Mozos como nuevo consejero delegado. La dimisión de Arendt, que afirmó que la elección de De los Mozos estuvo "presionada por un excesivo sentido de urgencia", planteó un serio problema a Indra. Arednt estaba en el órgano de administración de Indra como consejero independiente, una clave esencial en la compañía, ya que la proporción de independientes en el consejo, de un 50%, que se rompe con su marcha y la entrada de Amber Capital, ha sido uno de los factores (puede que el más importante) que ha evitado que la Comisión de Valores (CNMV) obligara a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi), que controla un 28% del capital, a lanzar una opa por el 100%. La CNMV abrió una investigación en Indra tras la salida de algunos consejeros en junio de 2022 en la que concluyó que quedaba acreditado "que los accionistas Sepi, Sapa y Amber cooperaron para llevar a cabo los ceses", aunque no vio indicios suficientes de que se tratara de una acción concertada. Si la Comisión hubiera comprobado que sí había existido una acción concertada entre representantes que sumaran más del 30% del capital para modificar el equilibrio en el consejo o la estrategia de la empresa, entre otros factores, hubiera obligado a la Sepi a lanzar una opa. Además, el hecho de que un 50% de los consejeros sean independientes cumple con las recomendaciones de buen gobierno y sobre todo con el acuerdo del propio consejo de Indra de junio del año pasado.

Estos cambios en el consejo permiten que Marc Murtra, el presidente no ejecutivo de la empresa, tome el control de Indra, donde el Estado, a través de la Sepi, tiene un 28% del capital. Además, y para mantener ese control, el presidente de Indra está dando entrada a socios afines que eviten el riesgo no deseado de que el Estado se vea obligado a lanzar una opa por el 100%. En esta línea hay que entender el aumento en el paquete accionarial del fondo Amber Capital hasta el 7,2% (que puede llegar hasta el 10%), de la firma industrial vasca Sapa, que ha subido del 5% hasta el 8%, y también el desembarco de la industrial madrileña Escribano con un 3% ampliable también hasta el 10%.

Indra, un campeón nacional

Indra lleva unos meses muy agitados sobre todo en lo relacionado a la gobernanza de la empresa. La llegada a la presidencia de Murtra hace dos años ha generado un redefinición estratégica para hacer de Indra un campeón nacional con un papel más relevante en la industria de defensa europea, y también una redefinición, o mejor una revolución, en el accionariado que se saldó con la abrupta marcha de los consejeros que no estaban de acuerdo con el nuevo rumbo de la empresa y también con el adiós (forzado) del anterior consejero delegado, Ignacio Mataix. A pesar de esto, el mercado ha dado su respaldo a los nuevos planes de Indra, que acumula una subida en bolsa superior al 60% desde la llegada de Murtra y que tiene una capitalización levemente superior a los 2.000 millones, muy por debajo de otros campeones nacionales europeos.