Carlos Alcaraz no pudo revalidar título en el ATP 250 de Umag. Y eso que la tarde comenzó de la mejor manera posible para el murciano, venciendo en la primera manga a Jannik Sinner (7-6) en el tie-break con un gran nivel de tenis mostrado por ambos tenistas. Fue mejor en el momento decisivo Alcaraz, y se llevó el primer set.

En el segundo, desperdició hasta seis bolas de break en el primer servicio de Sinner, que terminó salando la papeleta. A partir de ahí, el escenario cambió. Sinner se creció y Alcaraz empequeñeció. No hubo más historia a partir de ese momento. Sinner arrolló en los dos siguientes sets con un doble 6-1, que dejan al murciano con un mal sabor de boca evidente tras perder dos finales consecutivas (Hamburgo y Umag) en apenas semanas, y tampoco ha podido revalidar su primer título ATP, una situación que le generaba especial cariño.

No había pasado ni un mes desde que se vieron las caras por última vez. El ‘partido del futuro’ volvió a encontrarse en la final del ATP250 de Umag, donde reinó Carlos Alcaraz el curso pasado y donde defendía el título por primera vez.

Sinner-Carlos. Carlos-Sinner. Un duelo que se repetirá en múltiples ocasiones a lo largo de la próxima década. El murciano, con 19 años, y el italiano, con 20, ya son dos de las grandes atracciones de la ATP. Metidos en el top-10, están llamados a ser los grandes dominadores del circuito.

Antes de la final de Umag, ya se habían visto las caras en tres ocasiones. Dos cayeron para el cuadro del murciano, pero la última y más importante, en Wimbledon hace menos de un mes, salió vencedor el tenista italiano.

Carlos Alcaraz partía con un ligero favoritismo antes de la final, pues es la superficie que más gusta al murciano y en la que menos cómodo está Sinner. Y eso que el italiano venía de hacer un torneo excelente, sin ceder ni un solo set. Aún así, con vendaje en el tobillo y con dudas tras la sufrida victoria en semifinales, Alcaraz partía como favorito en las apuestas.

Se sabía de antemano que el partido no se iba a corresponder al de un nivel ATP 250. Era un partido de nivel superior. Yasí lo hicieron ver los dos desde el comienzo.

Gran nivel en el primer set

Ninguno cedía con su servicio. De hecho, ninguno pudo romper el saque de su rival en el primer set. Ambos dominaban con la derecha, pegando a la bola con una fuerza en cada golpe que hacía complicado ver peloteos largos. Y cuando los había, Alcaraz los cortaba con una de sus características dejadas.

Se llevó la primera manga el murciano, pero no sin antes sufrir. Fue en el tie-break, ya que no hubo ninguna rotura en el set. Se llegó al 6-6 y ahí, en los momentos decisivos, es cuando mejor compite el murciano. Se llegó a poner 5-1 con puntos inverosímiles, aunque remó Sinner para maquillar el resultado. Finalmente, no pudo lucharlo y cedió el set (7-6) a favor de Alcaraz.

Celebró Carlitos el primer set por todo lo alto. Todo lo contrario que Sinner, al que se le vio contrariado y con la mirada cabizbaja. Tenía que aprovechar ese subidón de ánimo y el bajón de su rival. Olió la sangre Alcaraz y a ello que fue. Empezó ganando su servicio y tuvo seis bolas de break en el saque de Sinner. No aprovechó ninguna el murciano, por lo que el partido siguió su ritmo (1-1).

Sinner se crece

Cuando parecía que Sinner empezaba a decaer, apareció al juego siguiente para romper el saque a Alcaraz, el que fue el primero del partido. De salvar seis bolas de break en el juego anterior, a romperlo en el posterior. Jannik Sinner es una roca mental. Y también es tremendamente bueno en lo referido a lo técnico.

Después de esa rotura, el que lo empezó a pasar mal fue Carlos Alcaraz. Del posible 2-0 arriba, se vio 1-5 abajo después de que Sinner le consiguiera ganar su saque por segunda vez consecutiva. Perdió la cabeza, comenzando a dar golpes sin sentido. El segundo set se lo terminó llevando Sinner (6-1) después de que terminara arrollando al murciano.

Alcaraz, dominado

Nada pudo hacer Carlos Alcaraz en la tercera manga contra el tenis desplegado por Jannik Sinner. Cometió muchos errores, más de los que se podía permitir ante este tipo de rival, y lo terminó pagando caro. Y eso que tuvo bolas de break para romperle el saque cuando aún iban 1-1 en la tercera manga. Las acabó salvando Sinner y al igual que en el segundo set, el marcador se decantó en cuestión de minutos hacia el italiano (5-1). Sinner sirvió para ganar y no falló, endosándole el 6-1 final.

Nueve bolas de break tuvo Carlitos para romper el servicio a Sinner, pero no aprovechó ninguna y la solidez e insistencia del italiano cuando peor estaban terminaron por desesperarle.

Con esta derrota, Alcaraz suma su segunda final perdida en apenas unas semanas, la de Hamburgo y Umag. Un momento complicado el que vive el murciano antes de encarar un tramo importante de la temporada, con dos Masters 1.000 y el USOpen. Momento de aprendizaje para Alcaraz, que abuen seguro volverá a exhibirse a su mejor nivel.