El balonmano cordobés tendrá para el próximo curso 22-23 un mapa renovado después de los movimientos de ascensos y descensos. Con el Ángel Ximénez de Puente Genil como principal referente -abordará su décima campaña consecutiva en la Liga Asobal-, el siguiente escalón lo ocupan, dos divisiones más abajo, cuatro representantes: el Cajasur Córdoba BM, el Naranjas de Palma del Río, el BM Pozoblanco y el Cordoplás La Salle. Todos ellos, junto a los equipos del Itea y el Deza CBM, que competirán en féminas, conocieron sus calendarios para la temporada que viene.
El derbi local entre el Cajasur Córdoba BM y el Cordoplás La Salle enfocará el interés en la primera jornada del Grupo F de la Primera Nacional, que arrancará el fin de semana del 18 de septiembre. El equipo granate, recién descendido de la División de Honor Plata, se medirá con el lasalliano, que llega como novato tras su ascenso en el campeonato anterior desde Segunda. El duelo se celebrará en el pabellón de Fátima. Los otros dos equipos de la provincia encaran sus primeros compromisos lejos de su cancha: el Ars Naranjas de Palma del Río jugará en la pista del Sanse y el Doble A Wop Pozoblanco lo hará en la cancha del Bolaños.
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Dos equipos cordobeses competirán en el Grupo D de la División de Honor Plata Femenina, categoría que es la tercera en el escalafón después de la División de Honor y la División de Oro. El Itea Córdoba iniciará el campeonato en la cancha del Montequinto de Dos Hermanas, mientras que el Deza Cajasur CBM jugará en el Pabellón Municipal Infanta Cristina frente al Roquetas. La Liga se iniciará también el fin de semana del 18 de septiembre.
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