Ni regodearse en las victorias ni torturarse por las derrotas. Una lección que enseña la experiencia. Y de eso Álvaro de Hita posee bastante. El portero del Ángel Ximénez Puente Genil, que a sus 43 años es uno de los profesionales con más horas de vuelo en la Liga Asobal, considera que el inesperado revés en el pabellón Alcalde Miguel Salas ante el Viveros Herol Navas (31-33) no debe traumatizar al nadie. Más bien lo entiende como una advertencia de que la tensión debe estar siempre al nivel máximo.

La escuadra de Paco Bustos tendrá la ocasión de resarcirse en la próxima jornada, que le cita este sábado con uno de los históricos de la división: el Helvetia Anaitasuna. "Esto es balonmano y hay que seguir", ha resultado De Hita, quien considerado que "el equipo está confiado, porque no por perder el otro día tiene que perder su seña de identidad". "Hemos hecho buenos resultados y hay que seguir en esta dinámica, sabiendo los errores que cometimos el otro día y que no podemos volver a cometerlos", resalta en declaraciones a los canales oficiales del club.

Invicto en sus salidas

El Ángel Ximénez, invicto en sus salidas, comparecerá en el Pabellón Anaitasuna de Pamplona (sábado, 20.30 horas) para abordar un encuentro que será retransmitido en directo por Navarra TV y LaLigaSportsTV. "El equipo se encuentra bien y con ganas, sabemos con quién nos enfrentamos y sabemos perfectamente que la derrota del otro día ya está pasada y hay que seguir adelante", subraya De Hita, erigiéndose en portavoz de una conjura de vestuario para retomar la línea que llevó al Ximénez al liderato de la Asobal, una posición tan maravillosa como irreal: el Barcelona, sempiterno campeón, está a otro nivel. El Ximénez lucha, y con acierto, por situarse entre los mejores de los "mortales" en la élite del balonmano español.

El conjunto de Puente Genil continúa en la segunda plaza con nueve puntos, pero con muchos equipos ya acechando su posición. Está con los mismos puntos que el Bidasoa Irún -el próximo equipo que pisará el Alcalde Miguel Salas-, por lo que puntuar en Pamplona puede significar un paso importante para perpetuarse en las posiciones cabeceras. "Nos enfrentamos a un equipo que es complicado porque Anaitasuna es un equipo de nuestra liga y porque al fin y al cabo en la clasificación son solo dos puntos menos", explica De Hita, que augura un partido de alto voltaje. "Es un histórico, un equipo que siempre nos ha puesto las cosas difíciles", dice. Los navarros, además, están en racha: llevan tres victorias y un empate en sus cuatro últimas jornadas.

"El año pasado conseguimos ganar pero nos costó muchísimo. Si queremos seguir con los objetivos que tenemos hasta ahora, que es ir partido a partido e ir sumando, este partido es vital", señala Álvaro De Hita, que hace una llamada a mantener el equilibrio entre la ambición y la humildad, "sabiendo que el rival es muy difícil pero confiando en nosotros mismos para sacar los dos puntos".