Sobresalto en la mañana del lunes de los trabajadores del Ayuntamiento de Córdoba --Asuntos Sociales, Consumo e Instituto Municipal de Deportes-- cuando sobre las 7.30 de la mañana han ido a acceder a las instalaciones situadas en la zona de preferencia del estadio municipal El Arcángel y han descubierto un agujero por el que supuestamente han entrado esta madrugada a robar mediante la técnica del butrón.

Los ladrones habrían accedido por un butrón --un agujero de más de un metro de diámetro-- practicado desde una zona en obras en la planta baja de las instalaciones.

El edificio no cuenta con sistema de alarma --salvo el de incendios obligatorio--, ni cámaras de vigilancia en el interior, solo una en el exterior, en la puerta de acceso. Tampoco contaba con vigilancia desde las 22.00 horas del viernes en que acabó el turno el policía local destinado a esa labor.

El conserje avisó a la policía

Esta mañana, el conserje de la delegación municipal de Asuntos Sociales ha sido el primero en llegar, y al abrir las dependencias y ver el butrón, en la misma entrada, ha avisado a la policía.

Los ladrones habían accedido a las cinco plantas del edificio y han ido forzando puerta tras puerta, abriendo cajones y armarios en busca, probablemente, de dinero, pues no se han llevado ni material informático, como portátiles o móviles, que había en las oficinas.

Agentes de la Brigada Científica de la Policía Nacional y de la policía judicial han registrado planta por planta en busca de pruebas. De momento, se desconoce si los ladrones se han llevado algo de las dependencias municipales o de las oficinas de Surgenia, en una de las plantas, lo que sí se ha confirmado es que los ladrones no han accedido a la sede del Córdoba CF SAD, situada en el fondo norte del estadio municipal.

Por el momento no hay detenidos y la Policía Nacional se muestra muy cauta a la hora de facilitar detalles de lo sucedido para evitar entorpecer la investigación.

Un centenar de trabajadores

Durante el tiempo en que la policía ha registrado el edificio los trabajadores --más de un centenar-- han tenido que permanecer fuera, integrándose a sus puestos de trabajo conforme los agentes iban peinando planta por planta, donde han tomado huellas y buscado pistas que ayuden a sus pesquisas.

A las 12.30 horas, la mayoría de los trabajadores ya estaban en sus puestos.