El Barça y Athletic de Bilbao dispondrán de 20.000 entradas cada uno para repartir entre sus socios y peñistas para la final de Copa del próximo 25 de mayo en el estadio Vicente Calderón de Madrid. El reparto fue anunciado ayer por la Federación Española de Fútbol tras una reunión celebrada con sendas delegaciones de ambos clubs en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas.

Las tres partes también acordaron que la hora de inicio de la final será a las 10 de la noche y que el club bilbaíno contará con la condición de equipo local "por el criterio de antigüedad" (el Barça fue fundado en 1899 y el Athletic, oficialmente, en 1901, aunque en 1898 un grupo de amigos constituyeron el Athletic Club). La federación, por su parte, se reserva 10.000 entradas para sus compromisos (el Calderón tiene una capacidad de 50.000 espectadores). El precio de las localidades irá desde los 60 euros, la más barata, hasta los 250 euros.

SIN BANDERA ESPAÑOLA Tanto Barça como Athletic rechazaron la propuesta de la federación de llevar en la camiseta un logotipo para la final con la bandera española. Sí aceptaron, por contra, lucir otro emblema, plateado, como símbolo de la final entre los dos clubs más coperos en la historia de la competición.

Por otro lado, el Barça se va hoy a Milán y estará más de media semana. Va hoy, juega mañana y volverá el viernes para evitar así la huelga general del jueves. Va, además, con la lección aprendida de la primavera del 2010 cuando el Inter de Mourinho le privó de ir a la final del Bernabéu. Ahora, Pep Guardiola está más precavido que de costumbre. Los jugadores, también. La historia se repite. Hace dos años, el Barça había superado al equipo interista en la liguilla (0-0 en San Siro y 2-0 en el Camp Nou), pero llegaron las semifinales, incluído Benquerença, el árbitro portugués de la ida, y todo se torció. Ahora, andan avisados. "El Milan será muy peligroso, tiene a jugadores muy encuhados", alertó ayer Valdes.

Aquel Inter del invierno no era el Inter de la primavera. El Milan actual es también mucho mejor que el Milan que empató primero en el Camp Nou (2-2) y perdió en San Siro (2-3), aunque ha perdido a su gran pilar defensivo: el central brasileño Thiago Silva, tres y cuatro semanas de baja.