La novedad en el hotel de concentración del Córdoba en La Manga la protagonizó ayer el uruguayo Sebastián Balsas, que llegó pasadas las 12.00 horas acompañado de su representante en España, el ex jugador blanquiverde Mariano Mansilla.

El espigado delantero (1,97) ha firmado un contrato de cesión por un año (sus derechos pertenecen por igual al Racing de Monteviedo y al San Lorenzo de Almagro) con una opción de compra de un millón y medio de euros y a su llegada a La Manga aplicó fina ironía sobre su autodefinición como jugador: "Con mi 1,50 alguna cazaré por arriba, aunque no solo soy un delantero poste; por mi altura, también me gusta ofrecerme a mis compañeros y con mi zancada me gusta encarar a la defensa rival con el balón controlado". Sebastián Balsas, que ya pudo llegar el pasado mes de enero a la disciplina blanquiverde, ya entrenó con el grupo en la sesión vespertina organizada por Paco Jémez.