CULTURA

Niño de Elche llevará al C3A de Córdoba un espectáculo que rompe las barreras de la música

La Caja Negra acogerá el sábado 20 a las 20.30 horas la propuesta 'La distancia entre el barro y la electrónica. Siete diferencias valderomarianas'

El espectáculo, de 60 minutos de duración, es de entrada gratuita hasta completar aforo

Niño de Elche.

Niño de Elche. / CÓRDOBA

Diario CÓRDOBA

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El C3A Centro de Creación Contemporánea de Andalucía presenta La distancia entre el barro y la electrónica. Siete diferencias valderomarianas, una propuesta del Niño de Elche, en el marco de la exposición temporal Val del Omar: una Técnica con T mayúscula que se encuentra abierta al público desde el pasado 21 de marzo hasta el próximo 1 de septiembre de 2024 en las salas T2 y T3 del C3A. El Niño de Elche (voz) estará acompañado por Ylia (electrónica), Emilio Pascual (sonido) y Benito Jiménez (luz).

Figura clave del flamenco contemporáneo, Niño de Elche ha asumido todo lo que, desde lo más elemental a lo verdaderamente esencial, nos ha regalado la práctica del género. Y por eso, porque no ha cejado en su empeño de reconocer las diferentes zonas cero que el arte y sus etiquetas dejan atrás, se auto-proclama exflamenco, una forma de expresar esa búsqueda inagotable que es personal y también colectiva. De hecho, su relación con la música electrónica y la electroacústica no se pueden entender sin la influencia de José Val del Omar, unos de los cineastas y artistas sonoros más determinantes del siglo XX.

La digitalización del archivo del genio granadino (Museo Reina Sofía) resultó fuente de inspiración y punto de partida para La distancia entre el barro y la electrónica, 7 diferencias valdelomarianas, doble vinilo de edición limitada publicado en 2020. Mediante la remezcla, el procesamiento y la recomposición de parte de los sonidos que Val del Omar grabó, recopiló y trató con técnicas pioneras en su época, Niño de Elche conectaba su imaginario con las últimas tendencias de la electrónica contemporánea.

Con la producción de Miguel Álvarez-Fernández y el apoyo del Centro de Residencias Artísticas (CRA) de Matadero Madrid y del espacio de creación Azala (Vitoria), el disco incorporaba influencias estéticas y procesuales de la música concreta, el serialismo, el ambient, el flamenco, el folclore español, el punk, el minimalismo y las técnicas de voz expandida, entre otras.

Un fascinante diálogo multidisciplinar que se sublima también en directo: la emoción y el vértigo de un espectáculo que, como es habitual en el ilicitano, obliga a esperar lo inesperado.